El avión Sunderland de la RAF y el submarino U-454 del Tercer Reich experimentaron una confrontación decisiva durante la Segunda Guerra Mundial.
Características del Sunderland y su Rol en la RAF
El Sunderland, perteneciente al Mando Costero de la RAF, mantuvo una posición destacada en la vanguardia del conflicto bélico, defendiendo a las naves aliadas contra los sumergibles enemigos.
Este avión, dotado de avanzados sistemas de radar, estaba específicamente diseñado para detectar y neutralizar submarinos, siendo el U-boat alemán uno de sus principales objetivos dada su amenaza constante a la flota aliada.
El U-boat, pese a ser una formidable máquina de guerra, mostraba vulnerabilidad ante la detección y las ofensivas aéreas del Sunderland.
El enfrentamiento del Sunderland vs. U-boat U-454
Mark Lardas relata en su obra “Sunderland vs. U-boat Bay of Biscay 1943-44” que hubo ocasiones en las cuales cazador y presa resultaban mutuamente destruidos. Un evento destacado tuvo lugar el 1 de agosto de 1943.
El U-454, un submarino Tipo VIIC, había zarpado bajo el mando del Kapitänleutnant Burckhard Hackländer el 26 de julio de 1943 desde La Pallice. Hackländer, con 283 días en el mar a cuestas, optó por rodear el golfo de Vizcaya por el sur para minimizar la exposición a la aviación enemiga.
La noche del 31 de julio, tras emerger a las 08:30 horas del 1 de agosto, una aeronave obligó al submarino a sumergirse. Esta secuencia se repitió al mediodía de ese mismo día.
El Decisivo Encuentro entre Fry y Hackländer
A las 14:00 h, tras 18 horas bajo el agua, el U-454 necesitaba emergencia de aire y recarga de baterías. A las 14:40 h, al emerger, el Sunderland comandado por el teniente K. G. “Bob” Fry detectó al submarino.
“Bob” Fry, con 28 misiones liderando un Sunderland, había pasado anteriormente por encima de los buques del 2.º Grupo de Apoyo del Capitán F. J. “Johnnie” Walker. Al detectar al U-454, Fry lanzó señales lumínicas para alertar a Walker y procedió con la ofensiva.
Contexto operativo del U-454 en situación crítica
Al detectar la aproximación del Sunderland desde una distancia de dos millas náuticas en el sector de babor, el capitán Hackländer tomó la decisión táctica de mantener el U-454 en posición superficial. “Las baterías estaban agotadas y el aire era viciado”, documentó posteriormente, resaltando la vulnerabilidad del submarino en ese instante.
Aunque Fry, el comandante del Sunderland, carecía de esta información, su observación primaria fue la presencia del submarino en posición de superficie. Su acercamiento no era el ideal para un ataque, pero no se disuadió.
La inapropiada altitud y velocidad del Sunderland impidieron a Fry liberar sus cargas de profundidad de forma efectiva. A bordo del U-454, se contaba con cañones gemelos de 20 mm y una arma adicional de 20 mm posicionada en la popa, cercana a la torre de mando. Estos sistemas defensivos fueron objeto de un intento de neutralización por parte del artillero de proa del Sunderland, aunque ambos lados tuvieron disparos erráticos.
Maniobra decisiva: el Sunderland desafía al U-454
Fry efectuó un viraje táctico y realizó una segunda pasada a ras del agua en dirección al U-454. La precisión del artillero con montura doble de 20 mm en el U-454 resultó ser crucial, impactando en ambos propulsores de estribor del Sunderland. No obstante, Fry logró mantener el dominio de la aeronave, procediendo a liberar seis cargas de profundidad. Esta acción resultó determinante: tres cargas impactaron en las proximidades del submarino, mientras que las otras tres comprometieron directamente la integridad estructural del U-454, causando su rápida desintegración y hundimiento.
De la dotación del submarino, 32 miembros perdieron la vida, pero Hackländer junto con 13 de sus hombres sobrevivieron y fueron posteriormente rescatados por el HMS Kite del 2.º Grupo de Apoyo.
El fatídico desenlace del Sunderland
Con daños significativos en dos de sus motores, el regreso del Sunderland se presentó inviable. Optando por un aterrizaje de emergencia, Fry dirigió la aeronave hacia las naves aliadas cercanas. Sin embargo, las condiciones adversas del mar impidieron un descenso estable, causando el desprendimiento del ala de estribor tras un impacto violento con las olas.
El HMS Wren, en proximidades, logró rescatar a seis tripulantes del Sunderland, situados en la sección de popa de la aeronave. Lamentablemente, otros seis, incluyendo a Fry, no tuvieron igual destino y perecieron en el incidente.