La embajadora de EE. UU. ante las Naciones Unidas pide a Rusia que respete las propuestas de Ucrania “para el paso seguro de la ayuda humanitaria en lugares específicos y acordados” y que se comprometa de forma inequívoca a facilitar el acceso inmediato a la ayuda humanitaria en el país.
En una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la escalada de la crisis humanitaria en el país, Linda Thomas-Greenfield también pidió el establecimiento de un sistema sobre el terreno para facilitar el movimiento seguro de los convoyes de ayuda y los vuelos para que los alimentos, las medicinas y otros suministros puedan entrar en Ucrania y llegar a los más necesitados.
El enviado estadounidense instó a los países que han prometido más de 1.500 millones de dólares en ayuda humanitaria para Ucrania a que conviertan rápidamente las promesas en fondos, afirmando que “mientras Rusia siga con su implacable y brutal campaña, la necesidad de ayuda no hará más que aumentar”.
Thomas-Greenfield dijo que el presidente ruso Vladimir Putin “tiene un plan para embrutecer a Ucrania” y que las últimas dos semanas han demostrado que “el pueblo ucraniano no se va a rendir”.
Thomas-Greenfield dijo que Estados Unidos seguirá apoyando al pueblo ucraniano, “pero el presidente Putin está claramente dispuesto a sacrificar la vida de miles de soldados rusos para lograr su ambición personal”.