La ciudad israelí de Holon ha sido reconocida por las Naciones Unidas como un centro de conocimiento de emergencias relacionadas con el “cambio climático”.
Esto convierte a Holon en la primera ciudad de Israel en ser un centro de resiliencia frente a las catástrofes provocadas por el cambio climático.
El anuncio lo hizo la Subsecretaria General de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), Mami Mizutori, en una ceremonia celebrada en el Ayuntamiento de Holon junto con el alcalde de la ciudad, Motti Sasson.
¿Por qué Holon ha sido reconocida por la ONU como el primer centro israelí de resiliencia ante las “crisis climáticas”?
Holon es la primera ciudad de Israel reconocida como centro de resiliencia en línea con el marco de MCR2030 (Making Cities Resilient). Esto significa que Holon se ha unido a las filas de grandes ciudades mundiales como Milán, Barcelona y Manchester, lo que supondrá dar la máxima prioridad a la gestión del cambio climático y compartir conocimientos y recursos.
Esto es importante ya que, en los últimos años, los municipios locales han tomado la iniciativa en la preparación de escenarios de emergencia provocados por el cambio climático, que no han hecho más que aumentar en los últimos años.
Las crisis que se producen como consecuencia del cambio climático son, entre otras:
- Lluvias torrenciales e inundaciones
- Incendios forestales
- Sequía
- Tornados
- Tormentas eléctricas
- Ventiscas
- Olas de calor
- Frentes fríos
- Hundimientos
Pero a pesar de ello, el UNDRR señaló que Holon se esfuerza por prepararse con antelación y ha realizado esfuerzos para que los habitantes de la ciudad sean resistentes.
Hace unos meses, los habitantes de Holon, tanto niños como adultos, participaron en un simulacro de terremoto organizado por el ayuntamiento.
Además, la ciudad se esfuerza por reducir su impacto negativo en el medio ambiente. Para ello, se han esforzado en promover la renovación urbana, instalar paneles solares, plantar árboles y mucho más. La ciudad también se ha esforzado en su propia infraestructura para mantener los desagües con el fin de reducir el riesgo de inundaciones. De hecho, Holon cuenta con el mayor depósito subterráneo de drenaje de Israel, con una capacidad de 4.000 metros cúbicos de agua.
Holon fue también uno de los muchos municipios de Israel que recibieron fondos del Ministerio de Protección Medioambiental para ayudar a combatir las crisis provocadas por el cambio climático.
Mizutori elogió a Holon por ser una “bienvenida incorporación a la comunidad internacional de UNDRR”.
“Como primer centro de resiliencia de Israel, nos comprometemos a compartir nuestros métodos con otras ciudades”, dijo Sasson. “Creemos que el desarrollo de la resiliencia urbana es un proceso continuo y es importante que los mecanismos urbanos se hagan de manera que se garantice una comunicación, cooperación y sinergia efectivas”.
Y prosiguió: “Este es un reto al que se enfrentan muchas ciudades de todo el mundo y estamos orgullosos de formar parte de la comunidad 2030MCR y afrontar estos retos juntos en cooperación internacional”.