En el Consejo de Seguridad de la ONU, los miembros ven un vídeo que muestra cadáveres en las calles de varias ciudades del país, así como fosas comunes.
El embajador de Rusia, Vasily Nebenzya, dice al Consejo que las atrocidades en Ucrania “no fueron confirmadas” por los testigos, y afirma que los ucranianos que se fueron a Rusia lo hicieron por su propia voluntad y no fueron secuestrados.
Dice que las imágenes de cadáveres son “montajes con civiles ucranianos asesinados por sus propios radicales en la mejor tradición de Goebbels”.