Un informe de la ONU presenta el panorama de la economía palestina tras un mes de guerra y el asedio casi total de Israel a la Franja de Gaza.
El producto interior bruto se redujo un 4 % en Judea y Samaria y Gaza durante el primer mes de guerra, sumiendo en la pobreza a más de 400.000 personas, según la ONU.
Los terroristas de Hamás, que gobiernan Gaza, lanzaron un ataque sorpresa contra Israel el 7 de octubre, en el que murieron unas 1.400 personas, en su mayoría civiles, y otras 240 fueron secuestradas.
Más de dos tercios de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han huido de sus hogares desde que Israel lanzó semanas de intensos ataques aéreos seguidos de una operación terrestre en curso, prometiendo destruir a Hamás.
La evaluación rápida de las consecuencias económicas de la guerra en Gaza, publicada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia Occidental, fue el primer informe de la ONU que mostraba el impacto del conflicto.
Si la guerra continúa durante un segundo mes, la ONU prevé que el PIB palestino, que era de 20.400 millones de dólares antes de que comenzara la guerra, se reducirá un 8,4 %, lo que supone una pérdida de 1.700 millones de dólares. Y si el conflicto dura un tercer mes, el PIB palestino descenderá un 12 %, con pérdidas de 2.500 millones de dólares y más de 660.000 personas sumidas en la pobreza, según sus proyecciones.
El Subsecretario General del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Abdallah Al Dardari, declaró en una conferencia de prensa que una pérdida del 12 % del PIB a finales de año sería “masiva y sin precedentes”.
En comparación, dice, la economía siria solía perder el 1 % de su PIB al mes en el punto álgido de su conflicto, y Ucrania tardó un año y medio de combates en perder el 30 % de su PIB, una media de alrededor del 1,6 % al mes.