Científicos de la Universidad Hebrea de Jerusalén, en colaboración con otros centros de investigación, han realizado un estudio multinacional de laboratorio en el que se ha descubierto que los tumores de adenocarcinoma ductal pancreático (ADP) se vuelven metastásicos debido a los cambios en el procesamiento de las moléculas de ARN, y no por cambios genéticos en el ADN.
El cáncer de páncreas es uno de los cánceres más letales y se caracteriza por una invasión local agresiva y una diseminación metastásica. En este estudio, los científicos evaluaron alrededor de 400 muestras de tumores de PDA, tanto metastásicos como no metastásicos, y descubrieron que una proteína central que controla el procesamiento del ARN, RBFOX2, se degrada y está presente en niveles mucho más bajos en las metástasis.
Desaparición de RBFOX2
La desaparición de RBFOX2 hace que cientos de genes produzcan ARN y proteínas de forma diferente, lo que contribuye a la capacidad invasiva de las células cancerosas. Los hallazgos demuestran que la desaparición de RBFOX2 afecta específicamente a un grupo de genes que controlan la organización del esqueleto celular y son importantes para la motilidad y la capacidad invasiva de las células.
Posibles opciones de tratamiento
Los científicos descubrieron que es posible retrasar la formación de metástasis de cáncer de páncreas en un modelo de ratón utilizando un fármaco disponible actualmente para tratar a pacientes con trasplantes de órganos que inhibe la actividad de este grupo de genes. También es posible anular la capacidad metastásica de células de cáncer de páncreas tomadas de pacientes mediante la intervención genética en el procesamiento del ARN de los genes afectados por RBFOX2.
El descubrimiento de los científicos ofrece dos posibles opciones para el tratamiento del cáncer de páncreas metastásico: un fármaco conocido que inhiba un proceso afectado por RBFOX2 o una terapia basada en ARN que intervenga en el procesamiento de ARN específicos afectados por RBFOX2.
Los hallazgos del estudio multinacional de laboratorio han sido publicados en la prestigiosa revista Nature y representan un paso importante en la comprensión de cómo se propaga y mata el cáncer de páncreas.