En 2023, la Policía de Israel experimenta un aumento en la dimisión de agentes, comparativamente superior a años anteriores, con múltiples factores citados como posibles causas.
Aumento en la dimisión de agentes policiales
Desde enero de 2023, 598 agentes de la Policía de Israel han presentado su dimisión. Adicionalmente, 109 agentes han sido despedidos y 420 se han jubilado.
Para contraponer estos datos, en 2022, 1.050 agentes renunciaron a sus cargos, mientras que en 2021 y 2020, las cifras fueron de 631 y 321 respectivamente.
De los 598 agentes que dimitieron en 2023, 514 eran policías a tiempo completo, representando un descenso del 15 % comparado con el año anterior.
Razones detrás de las dimisiones
Una razón citada por la institución policial es el impacto del COVID-19 y la inestabilidad del mercado laboral, lo que ha impulsado a muchos a buscar otras oportunidades laborales.
Ofer Ashkuri, exagente y director del Foro de Policías y Vigilantes, apunta al maltrato de agentes por parte de sus superiores como una razón principal. Factores como la negativa de traslados y efectos en evaluaciones contribuyen a este fenómeno.
Además, Ashkuri identifica el salario y los métodos de conducta y ascenso como otros factores detrás de las dimisiones.
Intentos de solución y datos adicionales
La Policía de Israel ha reconocido este problema y ha creado equipos de trabajo y estrategias para abordarlo, pero aún no ha logrado cambios fundamentales, según Ashkuri.
En 2021, el comisario Kobi Shabtai estableció un equipo para evaluar la magnitud del problema. Posteriormente, se formó otro equipo bajo la autoridad del jefe adjunto de la División de Recursos Humanos de la policía.
En 2022, se presentaron 87 denuncias contra funcionarios policiales. El Distrito de Tel Aviv lideró con 26 denuncias, seguido por el Distrito Sur con 16 y el Distrito Costero con nueve.
Denuncias de abusos en la Policía de Israel
Ashkuri afirma que hay más incidentes de malos tratos de los que reflejan las estadísticas oficiales. Muchos oficiales se abstienen de denunciar, sintiendo desconfianza en el sistema debido a la ausencia de consecuencias significativas para los perpetradores, incluso si se les descubre abusando de colegas.
Esta falta de confianza en el sistema se extiende también al Shin Bet, Agencia de Seguridad de Israel, y al Servicio de Prisiones de Israel. Las críticas, ya sean en conversaciones privadas o abiertas, son a menudo mal vistas.
Un oficial veterano compartió que, a pesar de su destacada trayectoria de 30 años, fue desplazado injustamente a un puesto inferior por un nuevo oficial con motivaciones personales, exponiéndolo a situaciones para las cuales no estaba capacitado ni equipado.
La respuesta oficial ante las dimisiones
Las cifras oficiales muestran que 514 policías dimitieron desde principios de año, una cifra ligeramente inferior a los 607 del año anterior. Sin embargo, la Policía de Israel también destaca un creciente interés por parte de antiguos oficiales en regresar al servicio.
En respuesta a la crisis, el comisario de policía y el ministro de Seguridad Nacional han iniciado reformas salariales y subvenciones destinadas a la retención y contratación de personal. Estas medidas ya están mostrando signos positivos.
Además, se ha lanzado una campaña de reclutamiento que ha atraído a 7.500 nuevos candidatos, quienes están actualmente bajo revisión.
Compromiso con la seguridad y el bienestar
La Policía de Israel insiste en que su principal recurso es el capital humano, y reitera su compromiso con la seguridad, las necesidades y el bienestar de todos sus oficiales.
Con casi 32.000 hombres y mujeres en sus filas, la organización se esfuerza por garantizar que todos reciban un trato justo y respetuoso mientras sirven al público.