Un anestesista fue condenado el domingo a nueve años y medio de cárcel por intentar asesinar a la pareja sentimental de una mujer de la que estaba enamorado inyectándole una dosis letal de sedante.
El Tribunal de Distrito de Lod también condenó a Asaf Karpel a pagar 120.000 NIS (35.000 dólares) en concepto de indemnización.
Su abogado Adi Carmeli dijo en un comunicado que la condena de dos dígitos que habían pedido los fiscales era “exagerada y excesiva”.
El pasado octubre, Karpel fue condenado por intento de asesinato en un acuerdo con la fiscalía.
La víctima prevista ha declarado al Canal 12 en el pasado que sigue sufriendo de ansiedad ante la posibilidad de que Karpel vuelva a intentar hacerles daño a él y a su pareja.
Según el escrito de acusación actualizado presentado ante el Tribunal del Distrito Central, Karpel, de 37 años, entabló amistad con la mujer, a la que llegó a conocer en el transcurso de su trabajo como médico.
Según la acusación, Karpel acosaba a la mujer, la esperaba cerca de su coche, le compraba regalos y le enviaba correos electrónicos y mensajes de texto en los que le expresaba su amor por ella y su deseo de mantener una relación sentimental.
Finalmente, Karpel decidió matar a la pareja de la mujer.
Robó la llave de su casa y dos jeringuillas del hospital donde trabaja, junto con anestésicos que pueden matar a una persona en caso de sobredosis y que normalmente sólo se administran durante una intervención, con el equipo de salvamento cerca.
Karpel supuestamente comprobó el horario de los turnos de la mujer para saber cuándo no estaba en casa, y acudió a su domicilio disfrazado, llevando un arma de electrochoque, un mechero, un bisturí y las jeringuillas con los anestésicos.
Tras esperar fuera varias horas, entró en el apartamento en plena noche utilizando la llave, fue al dormitorio y atacó al novio de la mujer.
Karpel utilizó el electrochoque e intentó inyectarle las jeringuillas, pero su víctima prevista se despertó, forcejeó y se liberó, tras lo cual Karpel huyó del lugar.
Karpel fue localizado poco después mientras conducía. En el registro de su coche se encontraron un mono negro, un sombrero, un pasamontañas y las jeringuillas.
En 2016, un hombre casado tres veces fue condenado por asesinar a dos esposas utilizando drogas que obtuvo de su amante, un anestesista. El anestesista también fue condenado por proporcionarle los sedantes.