Inspectores del Ministerio de Agricultura capturaron el domingo un pez depredador que había sido encontrado nadando en un estanque de peces decorativos en un centro comercial del centro de Israel.
Los inspectores visitaron el centro comercial tras un incidente ocurrido unos días antes en el que una mujer que metió la mano en el estanque fue mordida, lo que provocó una llamada alarmada a la línea de atención del ministerio.
Los inspectores que llegaron al lugar se sorprendieron tanto por la especie del pez (garra manchada) como por su tamaño: un metro de largo.
Dado que no era seguro dejar el pez en el estanque, los inspectores decidieron retirarlo con un equipo especial.
El Ministerio de Agricultura ha puesto en marcha una investigación para averiguar cómo llegó el gar, una especie de pez depredador, al estanque. La normativa pesquera israelí prohíbe la cría de esta especie, ya que puede atacar -incluso matar- a los humanos.
El aligátor se alimenta principalmente de otros peces y aves acuáticas, y puede llegar a medir dos metros.
Hagai Neuberger, que supervisa la inspección y la aplicación de la ley en el sector pesquero en el Ministerio de Agricultura, dijo: “Es importante señalar que, según la normativa pesquera, mantener peces prohibidos es un delito. La tenencia de peces prohibidos supone una amenaza para la biodiversidad en Israel y para las personas, y en este caso era un peligro claro y presente para el público”.