Una operación encubierta de la Policía del Distrito del Néguev y la Policía Militar reveló un caso de tráfico de armas. Dos reservistas de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) robaron granadas de fragmentación de una base militar en el sur de Israel y las vendieron a criminales.
Se sospecha que los soldados obtuvieron miles de dólares por las armas. Fueron detenidos e interrogados hace dos semanas bajo medidas cautelares.
A raíz de los resultados obtenidos en la investigación, los detectives realizaron allanamientos en las casas de otros dos sospechosos que supuestamente compraron las granadas.
Tanto la Policía como la Policía Militar aseguraron que continuarán luchando contra el tráfico de armas y trabajando para mantener la seguridad y el orden público.
Hace dos meses, en Afula, se incautaron decenas de armas de contrabando introducidas ilegalmente en Israel.
Las fuerzas de seguridad identificaron dos vehículos sospechosos en Afula, que transportaban a tres personas de Zarzir, presuntamente involucradas en el contrabando de armas. Al registrar los vehículos, los agentes descubrieron un gran alijo de armas, que incluía 34 pistolas, dos rifles de asalto Kalashnikov y dos rifles M-16.