El Departamento de Delitos Financieros de la Fiscalía General del Estado anunció el lunes que tiene previsto presentar cargos contra 10 israelíes por la venta ilegal de armas a China.
Según un comunicado oficial del departamento, ha informado a tres empresas y a 10 individuos de que serían acusados penalmente por graves delitos de seguridad relacionados con la venta ilegal de misiles a la superpotencia asiática.
Según se informa, los cargos incluyen delitos de seguridad, venta ilegal de armas, violación de la Ley de Control de las Exportaciones de Defensa y blanqueo de dinero, entre otros.
Los detalles facilitados por la Fiscalía del Estado indican que se cree que Efraín Menashe, propietario de la empresa Solar Sky, que fabrica, entre otras cosas, misiles de crucero, medió en un acuerdo con entidades chinas que competían por una licitación para suministrar misiles de crucero al ejército chino.
El acuerdo contó con la mediación de Zion Gazit y Uri Shachar, propietarios de una empresa de consultoría de seguridad que reúne a inversores extranjeros y empresas tecnológicas israelíes.Menashe también habría contratado a Zvika y Ziv Naveh, propietarios de Innocon, que fabrica vehículos aéreos no tripulados con fines de inteligencia.
También reclutó a otras personas que trabajaban en la producción de misiles de crucero y todas sus piezas para facilitar el acuerdo, según el comunicado.
La Unidad de Crímenes Internacionales de la Policía habría reunido pruebas que apoyan la afirmación de que los sospechosos produjeron y probaron docenas de misiles de crucero en territorio israelí, cerca de zonas residenciales, poniendo así en peligro la vida humana, dijo la Fiscalía del Estado.
Los misiles fueron trasladados a China en un transporte oculto y Menashe recibió millones de dólares, que registró como pagos recibidos de una empresa extranjera.
El comunicado subraya que los militares chinos acabaron por no utilizar las armas.
Las autoridades israelíes tratan muy seriamente cualquier violación de su ley de exportaciones de defensa.
Los contratistas de defensa son cualquier otra empresa que pretenda exportar tecnología, equipos o productos militares debe solicitar un permiso especial a la Agencia de Control de las Exportaciones de Defensa del Ministerio de Defensa, así como atenerse a una estricta lista de entidades extranjeras que constituyen el grupo de clientes potenciales.
Los datos de la Agencia muestran que actualmente hay 1.600 exportadores de defensa con licencia.
La investigación salió a la luz por primera vez en febrero de 2020, cuando la Agencia de Seguridad de Israel, o Shin Bet, dijo que estaba investigando a 20 personas por presuntas exportaciones ilegales de armas a un país asiático no identificado.