Al parecer, Jerusalén ha seguido de cerca el mortífero lanzamiento por parte de Rusia de drones suicidas de fabricación iraní contra la capital ucraniana de Kiev, temiendo que armas similares se dirijan a Israel en futuras guerras en su frontera norte.
El establishment de seguridad cree que drones similares serán desplegados contra Israel por el grupo terrorista Hezbolá y otros proxys iraníes, informó el lunes por la noche la cadena pública Kan sin citar ninguna fuente.
La cadena dijo que el temor respecto a la capacidad de Irán para fabricar drones es lo que llevó a Israel a reforzar sus defensas aéreas en el norte con sistemas como la Cúpula de Hierro, la Honda de David y los misiles Arrow.
La preocupación también ha llevado a una mayor cooperación en la materia entre Israel, EE.UU. y los firmantes de los Acuerdos de Abraham, EAU y Bahréin, dijo la emisora pública.
Hasta hace poco, Israel y EE.UU. eran los dos únicos países que habían adquirido experiencia operativa en la lucha contra los aviones no tripulados iraníes, dado su empleo en ataques dirigidos contra las fuerzas israelíes y estadounidenses en Oriente Medio.

La semana pasada, The New York Times informó de que Israel está proporcionando a Ucrania “información básica” sobre los drones suicidas iraníes desplegados por el ejército ruso, citando a un alto funcionario ucraniano.
El informe también decía que una empresa de seguridad privada israelí ha estado proporcionando a los ucranianos imágenes por satélite de las posiciones militares rusas.
En septiembre, Rusia comenzó a utilizar el avión no tripulado Shahed-136, de fabricación iraní, después de que, al parecer, recibiera entregas de cientos de unidades de Teherán, a pesar de que Washington advirtió a los iraníes contra la exportación del arma.
El presidente Volodymyr Zelensky ha pedido en repetidas ocasiones a Israel que le proporcione sistemas de defensa aérea, enumerando al Estado judío como uno de los cinco países que poseen la tecnología necesaria para ayudar a los ucranianos contra los ataques aéreos durante una entrevista con la CNN en septiembre.

Pero Jerusalén se ha resistido a proporcionar a Kiev armamento defensivo u ofensivo significativo, ya que intenta proteger su delicada relación con Moscú.
El ataque con drones del lunes en Kiev causó la muerte de cuatro personas y llevó al ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, a pedir sanciones de la UE a Irán.
La semana pasada, Zelensky dijo que los drones iraníes también se utilizaron en los ataques rusos contra las infraestructuras energéticas de varias ciudades ucranianas.
El domingo, The Washington Post informó de que Teherán está preparando su primera entrega de misiles balísticos de corto alcance a Moscú durante la guerra.
Según el subdirector de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, Morgan Muir, Rusia ha perdido más de 6.000 piezas de equipo desde el comienzo de la guerra. En medio de la presión ejercida por las sanciones occidentales, Moscú ha recurrido a Estados parias como Corea del Norte e Irán para obtener suministros militares.