Parece que la violencia y la perspectiva de una muerte prematura nos rodean. Encienda el telediario y oirá hablar de un intento de embestida con coche o de un ataque con arma blanca. Sintonice la radio y oirá hablar de un hombre golpeado con un casco de motocicleta en un incidente de violencia vial. Abra el periódico y leerá sobre redes de extorsión y “protección” que operan en el Sur.
Por no hablar de los terribles informes sobre accidentes de tráfico, brotes de polio y salmonela en el hummus Sabra. Es suficiente para hacerte gritar el título de aquel musical de 1961: “Paren el mundo: quiero bajarme”.
Rodeados por un bombardeo de noticias negativas en este país, un reciente estudio sobre los destinos menos y más seguros para viajar en todo el mundo, realizado por un sitio web estadounidense de comparación de seguros llamado The Swiftest, puede resultar una sorpresa asombrosa.
Según este estudio, Israel es el quinto más seguro entre los 50 países del mundo más visitados por los turistas. No, no lo ha leído mal. El quinto más seguro, no el quinto país más inseguro para visitar.
¿Y pensabas que todos esos estudios y encuestas que sitúan sistemáticamente a Israel entre los 10 países más felices del mundo eran contraintuitivos? Si nos quejamos tanto, cabría preguntarse, ¿cómo podemos ser felices? Sin embargo, estudio tras estudio, año tras año, demuestran que lo somos; que en términos de felicidad, estamos a la altura de Nueva Zelanda y de un grupo de países del norte de Europa que son los más felices del mundo. ¿Quién lo hubiera dicho?
Y ahora esto: Israel es el quinto destino turístico más seguro
Resulta que la pregunta que muchos de los que visitan Israel por primera vez reciben de amigos y familiares cuando revelan sus planes de visita: “¿Seguro que es seguro?” – está fuera de lugar. No sólo es seguro, sino que es muy seguro; más seguro, de hecho, que visitar Estados Unidos (puesto 30), Canadá (21), Australia (18), Francia (15) y el Reino Unido (10).
Es cierto que al presunto ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, le fue tan bien en las últimas elecciones porque se presentó con un programa de ley y orden que resonó entre una población que se siente cada vez más insegura. Pero según un estudio de The Swiftest, Israel -al menos en comparación con otros países- es más seguro que la mayoría.
El estudio -basado en datos extraídos de informes publicados por numerosas organizaciones como la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la Organización Mundial de la Salud, el Banco Mundial, Our World in Data y WorldRiskReport- elaboró un “índice de seguridad en los viajes” basado en varios criterios per cápita: el número de muertes por homicidio, muertes por accidentes de tráfico, muertes por envenenamiento no intencionado, muertes por malas condiciones higiénicas, años de vida perdidos por enfermedades transmisibles, años de vida perdidos por lesiones y la probabilidad de que un país sufra una catástrofe natural. Se supone que las muertes o lesiones provocadas por actos terroristas entran en las categorías de homicidios o años de vida perdidos por lesiones.
El índice global de seguridad de Israel fue de -60,22, lo que le otorga una calificación de A. Sólo Suiza, Países Bajos, Dinamarca y Singapur fueron considerados más seguros, obteniendo los dos últimos países una calificación de A+.
Según el estudio, Singapur es “el país menos mortífero para los turistas”. Con una tasa de homicidios, un índice de mortalidad en carretera y un riesgo de catástrofes naturales muy bajos, Singapur es una excelente opción para los viajeros en materia de seguridad. ¿Qué hace que Singapur sea tan seguro? Bueno, en Singapur la delincuencia no paga. Las consecuencias de cometer delitos en Singapur son increíblemente altas, incluso para los “delitos menores”. Esto, combinado con la alta vigilancia y presencia policial, hace de Singapur el país más seguro del mundo para viajar”.
¿Y los países menos seguros para visitar? Sudáfrica, con un amplio margen, principalmente por su tasa de homicidios, de 36,4 asesinatos por cada 100.000 habitantes. Según el informe, unas 68 personas son asesinadas cada día en este país de 60 millones de habitantes.
India siguió a Sudáfrica como segundo destino más mortífero para los turistas, pero no por los homicidios, sino por las muertes causadas por las malas condiciones higiénicas (18,6 por cada 100.000), los años perdidos por enfermedades contagiosas y el riesgo de catástrofes naturales.
Estados Unidos ocupa el puesto 20 de esta lista, obteniendo una calificación global de seguridad de C-, debido principalmente a una elevada tasa de homicidios (5 por cada 100.000 habitantes) y al alto riesgo de catástrofes naturales.
En la categoría de homicidios, Israel recibió una B, con 1,5 asesinatos por cada 100.000 habitantes. La única otra B que recibió fue en relación con las catástrofes naturales y la capacidad del país para hacerles frente, donde obtuvo una puntuación de B+.
En todas las demás categorías, Israel recibió una A. Por ejemplo, su incidencia de muertes en accidentes de tráfico (3,9 personas por cada 100.000) es baja en comparación con otras partes del mundo: 30,6 en Vietnam, 12,7 en EE.UU., 9,4 en Polonia y 8,3 en Grecia.
En Israel no hay casos de envenenamiento involuntario y el número de muertes causadas por malas condiciones higiénicas es insignificante. Asimismo, el número de años perdidos por enfermedades contagiosas y de años perdidos por lesiones debidas a diversos motivos -desde senderos en mal estado hasta violencia interpersonal y accidentes de tráfico- es también bajo en comparación con la mayoría de los demás países del estudio.
Y ahí está el problema. Nos parece que las cosas están fatal en cuanto a delincuencia, violencia y accidentes de tráfico porque estamos expuestos a ello hora tras hora en los medios de comunicación. A lo que no estamos expuestos es a la incidencia de la delincuencia, la violencia y los accidentes de tráfico en otros países del mundo. Si lo estuviéramos, nos sentiríamos mejor sobre cómo están las cosas aquí.
Si las cosas están tan bien, cabe preguntarse, ¿por qué me siento tan mal? En el caso de la seguridad general, la razón es que no comparamos nuestra situación aquí con la de la mayoría de los demás países. Cuando lo hacemos, nuestra situación no parece tan mala como a menudo parece.