Israel se negó a liberar a Khalil al-Awawda, miembro de la Yihad Islámica Palestina que se encuentra en huelga de hambre en protesta por su detención por parte de Israel, y a Bassam al-Saadi, jefe del grupo terrorista en Judea y Samaria.
Según la información obtenida por The Times of Israel, a pesar del alto el fuego en Gaza de anoche, Israel no tiene previsto liberar a los detenidos, tal y como pedía la PIJ.
Por otra parte, altos funcionarios israelíes destacan las intensas y, en su opinión, exitosas interacciones continuas con Egipto, Catar, Estados Unidos y otros países durante el conflicto de Gaza.
Por ejemplo, “eran conscientes de nuestros esfuerzos por evitar la intervención y por garantizar que [el conflicto] se redujera al mínimo”, dijo una de las autoridades implicadas en la situación.
Como fuerza económica estabilizadora, “los cataríes desempeñan un papel importante aquí”, explica un funcionario.
Gracias a estos esfuerzos, la tregua comenzó el sábado.
Según las fuentes, el hecho de que Ziad Nakhaleh, secretario general de la Yihad Islámica Palestina, se reuniera con el comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica en Teherán dificultó un acuerdo para detener las hostilidades.
Los funcionarios se mostraron especialmente satisfechos con el papel de Egipto. “La mediación egipcia fue muy intensa. Nuestra relación con ellos es extremadamente estrecha”.
En un principio se había previsto aplicar el alto el fuego ayer por la tarde, pero la dirección política israelí tuvo que prorrogarlo unas horas más para dar tiempo a las FDI a completar sus operaciones, según los funcionarios.