En distintos puntos de Israel, manifestantes de izquierda se movilizaron en protesta contra el plan de reforma judicial del gobierno, generando bloqueos en importantes vías de Tel Aviv.
Protestas en Tel Aviv
Un grupo de manifestantes logró bloquear parcialmente la autopista Ayalon en dirección sur, provocando la intervención policial en la zona. Durante la protesta, jóvenes que planean negarse a alistarse en el ejército quemaron sus citaciones de reclutamiento en señal de descontento.
Sophia Orr, una joven de 17 años, expresó su rechazo al alistamiento, argumentando que Israel debe trabajar por un futuro mejor para ambos pueblos, en lugar de priorizar la supremacía judía y la anexión de territorios.
En otro punto de la ciudad, los manifestantes encendieron una hoguera en medio de la calle Begin, mientras miles de personas se sumaban a las protestas en todo el país.
Acusaciones contra los impulsores de la reforma
El ex jefe del Estado Mayor de las FDI, Dan Halutz, señaló a los responsables de la reforma judicial como parte de una conspiración para controlar la democracia y transformar Israel en una teocracia. Halutz también exigió igualdad de derechos para aquellos que no se unen al ejército.
Por su parte, Halutz aclaró que no acusa a toda la comunidad religiosa, sino a sus líderes, y afirmó que Netanyahu desertó de la Primera Guerra del Líbano.
Mitin progubernamental en Netanya
Mientras tanto, en Netanya, se llevó a cabo una manifestación en apoyo al gobierno, con la presencia del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, y varios diputados. Los asistentes respaldaron la propuesta de reforma judicial y las políticas del gobierno actual.
Impacto de las protestas
Las manifestaciones evidencian la división en la opinión pública respecto a la reforma judicial y sus implicaciones para la sociedad israelí. La movilización de la izquierda en distintos lugares del país demuestra el descontento y la preocupación por el rumbo que podría tomar Israel si se implementa la reforma propuesta.
El futuro de la reforma judicial
Aunque las protestas han generado gran impacto en la opinión pública, el destino de la reforma judicial aún es incierto. La polarización de la sociedad y las diferencias entre los actores políticos dificultan la toma de decisiones y la implementación de cambios en el sistema judicial.