Tras una consulta de seguridad, el Ministro de Defensa Naftali Bennett aprobó el lunes por la noche nuevas medidas en relación con la Autoridad Palestina (AP) y la Franja de Gaza para reducir la propagación del coronavirus.
En cuanto a las zonas de Judea y Samaria asignadas a la AP, a partir del miércoles, solo se permitirá la entrada de trabajadores y comerciantes árabes palestinos en los sectores vitales de la economía, en las siguientes áreas: Salud, agricultura, enfermería y construcción. Las demás áreas se definirán de acuerdo con las necesidades específicas del Ministerio de Defensa y la Autoridad Nacional de Gestión de Emergencias.
Los trabajadores árabes palestinos que entren en territorio israelí serán acogidos en Israel por un período de uno a dos meses. La acogida, en todos sus aspectos, será responsabilidad de los empleadores, con sujeción a los compromisos que se acordarán con el establecimiento de defensa. Estas directivas se aplican solo a los empleados que tienen autorización de seguridad de la Agencia de Seguridad de Israel (Shin Bet).
Bennett instruyó que el paso de mercancías continúe como de costumbre, así como el cierre de la zona de Belén. Además, se prohíbe a los israelíes entrar en las zonas A y B, excepto en casos inusuales con aprobación individual.
El Ministro de Defensa ordenó que el cierre de Gaza continúe hasta nuevo aviso. El cruce de mercancías de Kerem Shalom seguirá funcionando como de costumbre.
Las decisiones se adoptaron en coordinación con las FDI, el Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT), el Consejo de Seguridad Nacional y el Shin Bet, y en consulta con el Ministro de Construcción y Vivienda, Dr. Yifat Shasha Biton, y fueron aprobadas por el Primer Ministro.