Un israelí residente en Los Ángeles, Estados Unidos, que vino a visitar el país hace un mes, fue diagnosticado con una mutación del coronavirus que se diagnosticó por primera vez en Los Ángeles. El israelí ya ha regresado a Estados Unidos, pero ha infectado a cinco personas aquí en Israel.
En un comunicado del Departamento de Salud se afirma que “en el Laboratorio Central de Virus del Ministerio de Salud, los investigadores identificaron un caso de la variante de Los Ángeles. Se ha confirmado que al menos cuatro personas más están infectadas con esa variante. El incidente está siendo investigado. El Ministerio de Sanidad continuará actualizando con hallazgos adicionales a medida que estén disponibles”.
El Canal 13 informó de que un pasajero que regresó de Dubai infectó a otras 180 personas. Todavía no se sabe si contrajo la mutación él mismo o no, pero es uno de los mayores contagios registrados desde el brote de la peste.
Esta misma noche (domingo), el gobierno ha aprobado la propuesta del Primer Ministro Benjamin Netanyahu de cerrar los cielos del país a los vuelos. El aeropuerto Ben Gurion permanecerá cerrado desde el próximo martes hasta el final del cierre, el próximo domingo a medianoche, excepto en los casos de vuelos por necesidades humanitarias y excepcionales.
El Primer Ministro Netanyahu dijo al comienzo de la reunión: “Nos adelantamos a todo el mundo. Ningún país ha hecho lo que nosotros vamos a hacer. Estamos sellando herméticamente el país y vacunando al menos a otro millón de personas”.
Más adelante en la reunión, Netanyahu dijo que el aeropuerto Ben Gurion cerrará mañana por la noche. Se dará una solución a los israelíes y judíos que se queden atrapados en el extranjero.
La ministra de Absorción, Pnina Tamanu Sheta, dijo que “hay inmigrantes que tienen que llegar esta semana y usted los envía al Comité de Excepciones”. Netanyahu respondió: “Hay que detener la inmigración. Pueden esperar hasta que desaparezca el virus”.
El ministro de Construcción y Vivienda, Yaakov Litzman, dijo en la reunión del gabinete que es partidario de que se pierda el aeropuerto ante el aumento de la propagación de la infección y el peligro de las distintas mutaciones. “Recuerdo que el ministro de Sanidad ordenó que no hubiera vuelos desde China hace un año, lo que nos dio tiempo a poner en marcha medidas preventivas”.