Un terrorista árabe logró infiltrarse en el puesto de Ramat Migron, en el Consejo Regional de Binyamin, y comenzó a atacar violentamente a los residentes locales.
Según los informes, el terrorista llegó a la casa de una mujer local que estaba cuidando a sus hijos en el momento del incidente. En un giro milagroso de los acontecimientos, un residente local que se encontraba cerca, vio a un individuo sospechoso cerca de la casa.
Cuando el hombre se acercó, fue atacado por el terrorista, que intentó estrangularlo, infligiéndole heridas leves antes de que otro residente que llegaba al lugar consiguiera socorrerlo. Juntos, los dos lograron derribar al agresor y retenerlo hasta que llegaron las fuerzas de seguridad.