La relación entre Estados Unidos e Israel está tensa tras la implementación de la polémica reforma judicial. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha sido criticado por un alto funcionario de la administración Biden, quien habló con el diario de izquierdas Forward bajo condición de anonimato. Según el funcionario, Netanyahu, y el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, no previeron la fría acogida de la reforma judicial por parte de la Casa Blanca.
La administración Biden ha dejado en claro que no está de acuerdo con la implementación de la reforma judicial. El presidente Joe Biden ha criticado públicamente al gobierno israelí y ha dicho que “no puede continuar” por el camino actual. Además, el presidente ha señalado que no tiene previsto invitar a Netanyahu a la Casa Blanca, a pesar de la tradición de reunirse con los primeros ministros israelíes recién elegidos.
Netanyahu ha respondido destacando que conoce a Biden desde hace 40 años, la fortaleza de la relación entre Estados Unidos e Israel y los derechos de Israel como nación soberana.
¿Cómo afecta la tensión a la relación entre EE. UU. e Israel?
El alto funcionario de la Administración Biden ha señalado que el Gobierno israelí se equivocó en su juicio, enfriando las relaciones con la Casa Blanca en un momento especialmente crucial para Jerusalén.
La tensión podría derivar en una mayor distancia entre EE. UU. e Israel, un cambio que podría tener implicaciones importantes para el país de Oriente Medio.
¿Quiénes son los críticos de Netanyahu?
El funcionario también ha señalado a los aliados de derecha de Netanyahu, diciendo que “pueden tratar de desprestigiar a la administración Biden como quieran”, pero “no es útil”. El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir (Otzma Yehudit), ha devuelto el fuego, criticando las declaraciones del presidente durante una entrevista con Galei Tzahal.
Ben-Gvir ha destacado que Israel es un país independiente y ha señalado que deben respetar la voluntad del pueblo, quien ha expresado su voluntad a través de las elecciones. La tensión entre EE. UU. e Israel parece lejos de disiparse.