El presidente sirio, Bashar Assad, inicia su primera visita oficial a China en casi 20 años, en busca de respaldo financiero para su país asolado por el conflicto.
China: un aliado clave para líderes aislados por Occidente
Bashar Assad se suma a la lista de líderes marginados por naciones occidentales, pero recibidos con honores en China, como Nicolás Maduro de Venezuela y Ebrahim Raisi de Irán.
El líder sirio aterrizó en Hangzhou, preparándose para la ceremonia inaugural de los Juegos Asiáticos. La bienvenida incluyó celebraciones y el ondear de banderas sirias y chinas.
Además, Assad tiene programado encontrarse con el presidente chino Xi y hacer una visita a la capital, Pekín.
Relaciones diplomáticas entre China y Siria
China ha brindado apoyo diplomático constante a Damasco, en especial en el Consejo de Seguridad de la ONU, siendo uno de sus miembros permanentes.
De acuerdo con el politólogo Oussama Dannoura, la visita marca una “importante ruptura del aislamiento diplomático” para Siria, resaltando la voluntad de Pekín de desafiar las normas occidentales.
El compromiso de China en el Medio Oriente ha crecido, evidenciado por la mediación en acuerdos entre Arabia Saudí e Irán, y el regreso de Siria al escenario árabe.
Antecedentes y contexto del viaje de Assad a China
La guerra en Siria comenzó tras el endurecimiento de Assad frente a protestas democráticas, escalando a un conflicto que involucró a varias potencias y grupos yihadistas.
Para Assad, esta visita representa una oportunidad para proyectar legitimidad internacional y esperar respaldo chino en la reconstrucción de Siria, según Lina Khatib de la SOAS de Londres.
Simultáneamente, protestas en la ciudad siria de Sweida demandan un cambio de régimen, lo que resalta la delicadeza del momento político para Assad.
China: refugio diplomático para líderes internacionales controvertidos
En tiempos recientes, China ha abierto sus puertas a líderes mundialmente criticados, como Alexander Lukashenko de Bielorrusia y representantes del régimen talibán en Afganistán.
Con sanciones occidentales sobre Moscú debido al conflicto en Ucrania, el ministro de Exteriores chino, Wang, se encuentra en Rusia, mientras Vladimir Putin prepara una visita a China en octubre.
Analistas anticipan que la visita de Assad a China se centrará en obtener fondos para reconstrucción, especialmente tras la adhesión de Siria a la iniciativa Belt and Road de China en 2022.
Compromisos económicos y expectativas para Siria
Aunque China prometió invertir 2.000 millones de dólares en Siria en 2017, Haid Haid, de Chatham House, señala que estos fondos “aún no se han materializado”.
Para Siria, unirse a la iniciativa Belt and Road no ha dado como resultado inversiones significativas por parte del gobierno chino ni del sector privado.