La Casa Blanca envió al asesor de seguridad nacional John Bolton en una misión para disipar las preocupaciones de Israel sobre la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de retirar las tropas estadounidenses de Siria. Un funcionario dijo que Washington “respalda en gran manera” los ataques israelíes contra objetivos iraníes en Siria.
Se esperaba que la retirada anunciada antes de la Navidad se completara en unas semanas, pero el calendario se ha ralentizado a medida que el presidente accedió a las solicitudes de los asistentes, aliados y miembros del Congreso para una reducción más ordenada.
Bolton planeaba reunirse con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu y otros funcionarios el domingo antes de viajar a Turquía. Los funcionarios israelíes expresaron su alarma de que una rápida retirada de los aproximadamente 2,000 soldados podría permitir a Irán expandir su influencia y presencia en Siria, sacudida por una guerra civil, y la militancia del Estado Islámico.
La medida de Trump ha aumentado los temores de despejar el camino para un asalto turco contra combatientes kurdos en Siria que han luchado junto a las tropas estadounidenses contra ISIS. Turquía considera a las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo, o YPG, un grupo terrorista vinculado a una insurgencia dentro de sus propias fronteras.
Un funcionario de la administración de Trump dijo a los reporteros que viajaban con Bolton, que Bolton tenía la intención de discutir el ritmo de la reducción, así como los niveles de tropas estadounidenses en la región. Se esperaba que Bolton explicara que algunas tropas estadounidenses con base en Siria para luchar contra ISIS se trasladarían a Irak con la misma misión y que algunas fuerzas estadounidenses podrían permanecer en un puesto militar clave en al-Tanf, en el sur de Siria, para contrarrestar la creciente actividad iraní en la región.
Bolton también transmitió el mensaje de que Estados Unidos “respaldará en gran manera” los ataques israelíes contra objetivos iraníes en Siria, según el funcionario, quien no estaba autorizado a revelar públicamente los planes de Bolton antes de las reuniones y habló bajo condición de anonimato.
Netanyahu ha dicho que la retirada de Estados Unidos no disuadirá a Israel de continuar atacando los intereses militares iraníes en Siria. El jueves, le dijo a los cadetes de las FDI en la Universidad Bar Ilan que Israel continuaba “actuando con determinación contra cualquiera que tratara de ponernos en peligro”.
Bolton advirtió al presidente de Siria, Bashar Assad, que no use la reducción de fuerzas de los Estados Unidos como pretexto para usar armas químicas contra los sirios, y dijo que “no hay cambios” en la posición de los Estados Unidos de que su uso es una “línea roja”. Trump ha llevado a cabo dos veces ataques aéreos en Siria en respuesta a ataques químicos, con la intención de disuadir a Assad.
“Hemos intentado dos veces mediante el uso de la fuerza militar para demostrarle al régimen de Assad que el uso de armas químicas no es aceptable”, dijo Bolton mientras se dirigía a Israel. “Y si no prestan atención a las lecciones de esos dos ataques, el siguiente será más revelador”.
El anuncio de Trump sobre el retiro de tropas previsto fue recibido con sorpresa y condena por muchos legisladores y aliados de los EE. UU., y provocó la renuncia del secretario de Defensa Jim Mattis y del enviado especial de Estados Unidos para la coalición anti-ISIS en protesta.