Estados Unidos sigue alarmado por el gobierno sirio y los ataques aéreos de Rusia en el noroeste de Siria y cree que se trata de una “escalada temeraria” de violencia, dijo el martes el Departamento de Estado, informa Reuters.
Los ataques aéreos gubernamentales, respaldados por Rusia, se han centrado en el sur de la provincia de Idlib y en las zonas cercanas de Hama, y han desarraigado a casi 250.000 personas. El bombardeo mató a 229 civiles e hirió a otros 727, según la organización benéfica médica UOSSM.
“Los ataques indiscriminados contra civiles y las infraestructuras públicas como escuelas, mercados y hospitales son una escalada temeraria del conflicto y son inaceptables”, dijo la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus.
“La violencia debe terminar”, dijo Ortago.
Cientos de miembros del Congreso de los Estados Unidos firmaron una carta al presidente Donald Trump la semana pasada argumentando que los Estados Unidos deberían seguir comprometidos con el conflicto en Siria, diciendo que estaban “profundamente preocupados” por los grupos extremistas en el país.
Muchos legisladores estadounidenses, tanto los republicanos como los demócratas de Trump, han estado profundamente preocupados por la política de Siria desde diciembre, cuando Trump decidió retirar a los 2.000 soldados estadounidenses de Siria. Más tarde, Trump acordó dejar una pequeña presencia estadounidense para ayudar a mantener la presión sobre el Estado Islámico (ISIS).