El Al, aerolínea insignia de Israel, comunicó este domingo que continuará con los topes en los precios de boletos hacia cuatro destinos internacionales principales, al menos hasta febrero de 2025. Esta política, implementada en agosto, busca aliviar el impacto de los altos costos de viaje derivados de la guerra en curso.
Los pasajes de ida y vuelta hacia Atenas tendrán un precio máximo de 299 dólares. Por su parte, los boletos hacia Vilna y Dubái costarán como máximo 349 dólares, al igual que los vuelos a Frankfurt, que reemplazan a Larnaca, Chipre, cuyo precio máximo anterior de 199 dólares ha sido eliminado del plan.
La tarifa establecida aplica únicamente a los billetes “lite” en clase económica. Según la aerolínea, se operan decenas de vuelos semanales hacia estos cuatro destinos, y se trabaja en la posibilidad de añadir más frecuencias para satisfacer la creciente demanda.
El Al también señaló que habrá decenas de miles de boletos disponibles a los precios establecidos durante el periodo mencionado. Sin embargo, la eliminación de otras opciones ha limitado la oferta en el mercado.
Desde el inicio de la guerra en octubre de 2023, muchas aerolíneas extranjeras han suspendido sus servicios a Israel. Esto ha dejado el mercado casi exclusivamente en manos de El Al, aerolíneas israelíes más pequeñas y algunas compañías del Golfo y Europa del Este.
La combinación de la reducción en la oferta de vuelos y la alta demanda ha generado un alza en los precios. El Al, junto con otras aerolíneas israelíes, ha sido la principal beneficiada, consolidando su control sobre los viajeros que utilizan el aeropuerto Ben Gurion.
No obstante, la aerolínea ha enfrentado críticas por supuestamente aprovechar la situación regional para aumentar sus ingresos, habiendo registrado su trimestre más rentable desde el inicio de la guerra.