El comandante general de la mayoría de las Fuerzas Democráticas Sirias kurdas (SDF) acusó el jueves a los soldados de Turquía y a sus aliados de “ocupar aldeas cristianas” en el norte de Siria, donde funcionarios turcos afirmaron esta semana que su operación militar había terminado.
El presidente Recep Tayyip Erdogan lanzó este mes la “Operación Primavera de la Paz”, una invasión del norte de Siria que Erdogan consideró necesaria para devolver a su patria a algunos de los 4 millones de refugiados sirios en Turquía. Turquía declaró que su objetivo era la creación de una “zona segura” formada por territorio kurdo a través de la eliminación de la población indígena kurda, a la que Turquía reemplazaría con refugiados sirios, en su mayoría árabes.
Las fuerzas kurdas condenaron la invasión como un intento de “limpieza étnica”, que según ellos continuó después de que el miércoles finalizara un acuerdo de alto el fuego.
Estados Unidos, cuya retirada precipitó la invasión turca, y el aliado cercano de Rusia, el dictador sirio Bashar al-Assad, negociaron el acuerdo.
“Turquía no se ha adherido al acuerdo de alto el fuego con Estados Unidos y continúa su guerra”, dijo Mazloum Abdi, comandante general de las Fuerzas de Autodefensa, el jueves en Twitter. “Turquía, con jihadistas, comenzó a ocupar [sic] pueblos cristianos y a intentar entrar en Tall Tamir, predominantemente asirios [sic], amenazados de aniquilación. Los EE.UU. deben cumplir con sus obligaciones”.
El Kurdistán sirio (Rojava), el principal objetivo de la invasión de Turquía, es el hogar de una creciente población de cristianos que huyeron del Estado Islámico cuando el grupo terrorista estableció un califato centrado al sur de la región en Raqqa. Después de que las SDF, con ayuda de Estados Unidos, derrotaran a ISIS en Raqqa, los cristianos de Rojava han estado aprovechando las tierras cultivables y la ausencia de jihadistas árabes suníes en territorio kurdo para reconstruir sus vidas.
Como han advertido los grupos de ayuda, la “Operación Paz Primavera” es una amenaza directa para estas comunidades. El portavoz del SDF, Mustafa Bali, advirtió en una declaración similar a la de Abdi que Tal Tamir [Til Temir], hogar de una de las comunidades cristianas en resurgimiento de Rojava, está bajo fuego.
The small Christian population that managed to survive ISIS are now fleeing their homes in Khabur area near Til Temir due to Turkish attacks. On the day the House voted to recognize Armenian Genocide, another genocide is just starting. pic.twitter.com/Af4ojr1Z6f
— Mustafa Bali (@mustefabali) October 30, 2019
Bali añadió que las fuerzas turcas habían estado utilizando el espacio aéreo sirio controlado por fuerzas estadounidenses para atacar zonas civiles. “La gente está siendo sometida a una campaña de limpieza étnica por parte de [Turquía]”, dijo, describiendo a Washington y Moscú como “responsables” del ataque porque habían ayudado a negociar el alto el fuego.
Reuters informó el jueves que la población local ha visto vehículos militares estadounidenses patrullando la frontera sirio-turca por primera vez desde que el presidente Trump anunció este mes que retiraría las tropas estadounidenses de la región. Una fuente kurda dijo a Reuters que la patrulla no sería la última de su tipo.
Los vídeos que circulan en los medios de comunicación social de Tal Tamir muestran fuertes enfrentamientos y civiles que huyen.
Local sources say with the Turkish forces approaching Tal Tamir city people fleeing the area. City was the first point of refuge for displaced residents of Ras al-Ain and its hospital is very important for the region. Tal Tamir is outside of so called ‘safe zone’ of 32 km depth pic.twitter.com/nCr8fgMAEY
— Mutlu Civiroglu (@mutludc) October 30, 2019
El servicio de noticias kurdo Rudaw señaló el miércoles que Tal Tamir era también el hogar de civiles que ya habían huido de la invasión turca desde la ciudad de Ras al-Ain, a la que los kurdos se refieren como Sare Kani. Los habitantes de Tal Tamir describieron la situación como “no buena”.
El servicio oficial de noticias de Assad, la Agencia Árabe Siria de Noticias (SANA), corroboró la noticia de que “los terroristas y mercenarios de Erdogan” están atacando pueblos en Rojava. Los “terroristas” en cuestión son miembros del Ejército Sirio Libre (FSA), una coalición de fuerzas anti-Assad que incluye a al-Qaeda y otros elementos jihadistas. Los vídeos de los campos de batalla de Rojava muestran a los miembros de la FSA gritando “Allahu akbar”, el clásico grito de guerra jihadista, y profanando los cadáveres de los combatientes kurdos. Las SDF se han referido a la FSA como “la nueva ISIS”.
El acuerdo de alto el fuego dependía en parte de que las fuerzas de Assad entraran en Rojava y aseguraran las zonas contra la invasión turca. Las fuerzas kurdas han operado de manera independiente de Assad, sin atacar ni cooperar con sus tropas. La “Operación Primavera de Paz” obligó a las SDF a aceptar la presencia de tropas de Assad en su territorio. SANA informó el miércoles de “feroces enfrentamientos” entre soldados turcos y tropas de Assad en Ras al-Ayn.
Tras el fin del alto el fuego el miércoles y la reanudación de los ataques turcos, los informes de los miembros de las SDF sobre el terreno indican que el ejército de Assad comenzó a retirarse de las líneas de batalla turcas, dejando a los civiles locales expuestos a ataques.
Since Russia did not fulfill its promise to ensure safety of Syrian soldiers/border guards, SAA troops have withdrawn on their own from many spots along contact lines.@mustefabali @zana_medi pic.twitter.com/3FkDyTnJhQ
— Bahtiyar Umut (@baxtiyarumut) October 30, 2019
El Ministerio de Defensa de Assad pidió el miércoles a las SDF que se convirtieran en un brazo oficial del ejército sirio.
“En Siria nos enfrentamos a un enemigo común, y debemos sacrificarnos como el pueblo de la Siria unificada de los árabes y los kurdos para restaurar cada centímetro de los queridos territorios sirios”, suplicó el ministerio de defensa.
Las SDF rechazaron la invitación.