Un ataque aéreo atribuido a Israel en el centro de Siria mató a nueve combatientes progubernamentales, cuatro de ellos sirios y cinco de nacionalidad indeterminada, dijo el jueves un monitor de guerra con sede en Gran Bretaña.
La agencia de noticias estatal siria SANA había citado anteriormente a una fuente militar diciendo que el ataque de finales del miércoles cerca de la ciudad de Palmira había matado a un soldado y herido a otros tres.
“Alrededor de las 23:34 horas, el enemigo israelí llevó a cabo una agresión aérea… sobre la zona de Palmira, apuntando a una torre de comunicaciones y a varias posiciones en sus alrededores”, dijo la fuente a SANA.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un grupo vinculado a la oposición cuya financiación no está clara, dijo que el ataque tuvo como objetivo varias posiciones iraníes, entre ellas la torre de comunicaciones, cerca de la base aérea T4 al este de Palmira. El Observatorio, con sede en Gran Bretaña, ha sido acusado en ocasiones de inflar el número de víctimas.
Informó de que el ataque mató a cuatro sirios que luchaban con grupos proiraníes que respaldan al gobierno de Damasco, entre ellos un soldado del ejército sirio, así como a otras cinco personas cuya nacionalidad no estaba inmediatamente clara.
Ni Israel ni Estados Unidos han reconocido haber realizado el ataque. Por lo general, Israel no comenta los ataques específicos que supuestamente lleva a cabo en Siria, pero sí reconoce en general que lleva a cabo operaciones contra grupos vinculados a Irán en el país para impedir la transferencia de armas avanzadas y prevenir ataques contra Israel desde Siria.
La semana pasada, un ataque con misiles israelíes contra la misma base aérea mató a dos combatientes extranjeros proiraníes, según el Observatorio.
SANA dijo que seis soldados resultaron heridos en ese ataque.
Desde el estallido de la guerra civil siria en 2011, Israel ha llevado a cabo de forma rutinaria ataques aéreos dentro de Siria, en su mayoría dirigidos a las tropas del gobierno sirio, así como a las fuerzas aliadas iraníes y libanesas.
Antes del último ataque, el jefe de la inteligencia militar de Israel, el general de división Aharon Haliva, dijo que Irán “sigue promoviendo la subversión y el terror” en Oriente Medio.
“Seguiremos obstaculizando las acciones de Irán, para cubrir y dañar sus capacidades, y tomaremos medidas para preservar el poder de Israel”, dijo en comentarios transmitidos por los militares.
Irán, estrecho aliado de Assad, mantiene su propia presencia militar en Siria y apoya a una serie de milicias predominantemente chiítas en el país. Estos grupos luchan junto a las tropas de Assad contra la oposición del país, pero Israel sostiene que también se utilizan para llevar a cabo ataques contra Israel y para facilitar la transferencia de armas y otros materiales en toda la región.