Según la agencia de noticias israelí Nziv.net, Moscú fue informada de los últimos ataques con misiles israelíes en las afueras de Damasco. La razón de ello es el supuesto acuerdo tácito entre Moscú y Jerusalén que otorga a Israel el derecho a atacar a las fuerzas militares iraníes situadas en Siria.
“La coordinación entre Israel y Rusia se basa en el interés mutuo de ambos países. Israel está interesado en la lucha contra el arraigo iraní en Siria. Al mismo tiempo, la lucha israelí contra Irán en Siria sirve a los intereses de Rusia de debilitar la influencia de Irán en Siria, ya que puede convertirse en una amenaza para el control de Rusia en Siria. Además, tanto Rusia como Israel tienen un interés común en evitar el conflicto entre ellos”, informa Nziv.net.
A su vez, los expertos señalan que, pese al despliegue de los sistemas rusos de defensa aérea S-300 en Siria, todavía no se han utilizado, a pesar de que los ataques aéreos israelíes amenazan la seguridad del ejército ruso en Siria. Inicialmente, los sistemas de defensa se desplegaron para disuadir a las aeronaves israelíes, si continuaban realizando ataques aéreos en Siria.
Anteriormente, Moscú condenó los ataques aéreos israelíes sobre el territorio sirio, calificándolos de actos de agresión.