Los medios de comunicación estatales sirios informaron a primera hora de la mañana del miércoles de que Israel había disparado varios misiles tierra-tierra desde los Altos del Golán hacia lugares de Quneitra, cerca de la frontera, causando algunos daños materiales.
Informes independientes indicaron que los objetivos de los ataques estaban cerca de Madinat al-Baath y Rwihinah, ambos situados cerca de la frontera con Israel.
Los ataques son los segundos presuntos ataques israelíes en Siria en una semana. El jueves, varios lugares fueron blanco de misiles tierra-tierra cerca de Zakyah, al sur de Damasco. Según el sitio web Syrian Capital Voice, las milicias iraníes controlan lugares y almacenes en los sitios que fueron atacados.
Hace dos semanas, un misil antiaéreo disparado desde Siria hizo sonar las sirenas de los cohetes en y cerca de Umm al-Fahm, en el norte de Israel, mientras los medios estatales sirios informaban de un supuesto ataque aéreo israelí cerca de Damasco. Según la agencia de noticias estatal siria SANA, un soldado sirio y cinco civiles murieron en el supuesto ataque aéreo israelí.
Uno de los lugares atacados fue el Centro de Estudios e Investigación Científica de Jamraya, según Capital Voice. Según el informe, se produjo una gran explosión en el lugar tras el ataque.
Las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron posteriormente que atacaron emplazamientos de defensa aérea sirios en respuesta al misil antiaéreo que entró en el espacio aéreo israelí. Los objetivos incluían un radar sirio y baterías de defensa aérea.
El lunes, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, condenó los ataques israelíes contra Siria, advirtiendo que estos ataques podrían provocar una escalada. El ministro de Asuntos Exteriores sirio, Faisal Mikdad, advirtió que Siria respondería a los ataques israelíes.