David Julius, profesor de fisiología de la Universidad de California en San Francisco, cuyos abuelos huyeron del antisemitismo en la Rusia zarista, recibió el lunes el Premio Nobel de Fisiología o Medicina de este año. Compartió el premio con Ardem Patapoutian, biólogo molecular y neurocientífico del centro de investigación Scripps.
El comité del Premio Nobel citó las investigaciones de Julius y Patapoutian “por sus descubrimientos de los receptores de la temperatura y el tacto”, que han mejorado los tratamientos del dolor causado por diversas enfermedades.
Julius nació en 1955 y creció en Brighton Beach, que entonces albergaba una gran población de emigrantes judíos rusos.
Julius describió el barrio como “una plataforma de aterrizaje para inmigrantes de Europa del Este como mis abuelos, que huyeron de la Rusia zarista y del antisemitismo en busca de una vida mejor”.
Licenciado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de California en Berkeley, Julius ha dedicado su carrera a investigar el funcionamiento de sentidos humanos como el tacto, el dolor y el calor, y ha utilizado la capsaicina, la sustancia química de los pimientos que los hace arder, para explorar cómo las terminaciones nerviosas humanas sienten el calor.
“Estos descubrimientos revolucionarios han dado lugar a una intensa actividad de investigación que ha permitido aumentar rápidamente nuestra comprensión de cómo nuestro sistema nervioso percibe el calor, el frío y los estímulos mecánicos”, escribió el comité del Premio Nobel en su anuncio de los ganadores.