Existe una clara relación entre la deficiencia de vitamina D y la mortalidad y gravedad del COVID-19, según investigadores de la Facultad de Medicina Azrieli de la Universidad de Bar-Ilan.
El estudio, publicado el jueves en la revista PLOS ONE, fue uno de los primeros en estudiar los niveles de vitamina D antes de la infección por COVID. Los investigadores registraron la información de más de 1.100 personas que participaron en el estudio entre abril de 2020 y febrero de 2021 en el Centro Médico de Galilea que tenían pruebas de PCR positivas, ajustando por edad, género y enfermedades crónicas.
A todos los participantes involucrados se les buscaron los niveles de vitamina D medidos antes de la infección entre dos semanas y dos años.
Los resultados oficiales mostraron que los que tenían deficiencia de vitamina D eran 14 veces más propensos a tener casos graves o críticos del COVID-19 que los que no. El grupo con deficiencia de vitamina D tuvo una mortalidad del 25,6 %, mientras que los que tenían niveles suficientes fue del 2,3 %.
El Dr. Amiel Dror, del Centro Médico Galileo y de la Facultad de Medicina Azrieli, que dirigió el estudio, dijo que los “resultados sugieren que es aconsejable mantener niveles normales de vitamina D. Esto será beneficioso para quienes contraigan el virus”.
“Existe un claro consenso para la administración de suplementos de vitamina D de forma regular, tal y como aconsejan las autoridades sanitarias locales y las organizaciones sanitarias mundiales”.