La empresa Brenmiller Energy, dedicada al almacenamiento de energía térmica, inauguró su primera planta de producción en Dimona, Israel, con miras a impulsar la transición a fuentes renovables.
Tecnología de almacenamiento térmico
La fábrica, apoyada por fondos de la UE, espera producir sistemas de almacenamiento capaces de retener hasta cuatro gigavatios de energía para finales de 2023. La tecnología de Brenmiller, empleada en Israel, Estados Unidos, Rumanía, Italia y Brasil, tiene como objetivo contribuir al abandono de los combustibles fósiles en la industria.
La transición hacia energías renovables depende de la capacidad de almacenar energía para liberarla en momentos en que no haya sol o viento. Las unidades de Brenmiller incluyen calentadores eléctricos y roca triturada para almacenar energía a altas temperaturas, proveniente de fuentes solares, eólicas, de la red eléctrica, de tubos de escape, o de la combustión de biomasa.
La energía se libera en forma de vapor, agua caliente o aire caliente, utilizados en diversos entornos industriales como la manufactura, producción de alimentos, procesamiento de carne, lavanderías comerciales y hospitales.
Expansión y demanda creciente
Avi Brenmiller, fundador y CEO de la compañía, señaló que la fábrica permitirá satisfacer la creciente demanda de sus sistemas y añadió: “Producimos almacenamiento limpio a partir de materiales respetuosos con el medio ambiente para producir energía limpia”. En 2022, Brenmiller cotizó sus acciones en Nasdaq y actualmente cotiza en Nueva York y Tel Aviv.
Apoyo del Ministerio de Protección Medioambiental
El Ministerio de Protección Medioambiental de Israel destinará 2,2 millones de NIS (605.000 dólares) a la instalación de la tecnología de Brenmiller en la empresa de fabricación de bebidas Tempo, en la ciudad costera de Netanya. Esta implementación proporcionará hasta 14 toneladas de vapor por hora y podrá almacenar 35 megavatios hora de energía.