Esta semana, las HMO israelíes comenzarán a hacer pruebas de anticuerpos para determinar si una persona sufrió de COVID-19 y si desarrolló inmunidad a él.
La semana pasada se reveló que Israel iba a realizar 100.000 pruebas serológicas para COVID-19 en un esfuerzo por determinar el grado de infección en la población, después de comprar 2,4 millones de kits de pruebas hace más de dos semanas.
Si tienen éxito, las pruebas revolucionarán la forma en que el gobierno ha luchado contra el virus hasta ahora.
Esto permitiría que una gran parte de la población quedara excluida del autoaislamiento, lo que les permitiría volver a entrar en el mercado laboral e incluso les permitiría volar sin necesidad de una cuarentena posterior.
El Ministerio de Salud declaró que, si las pruebas resultaran eficaces, las poblaciones de riesgo, como los ancianos, las personas que padecen enfermedades subyacentes y el personal médico, serían los primeros en someterse a las pruebas. Las pruebas serían voluntarias.
La prueba se realiza como un análisis de sangre regular y se llevará a cabo en las clínicas del HMO en todo el país, así como en casas privadas si la persona en cuestión está en auto-aislamiento o no puede salir de su casa por otras razones médicas.
Las pruebas son baratas de obtener y muy sencillas de realizar con los resultados que se esperan en 40 a 50 minutos después del chequeo.
Se dice que los anticuerpos, que protegen el cuerpo del virus, se desarrollan unas dos semanas después de la exposición inicial al patógeno. Aún no está claro por cuánto tiempo los anticuerpos del coronavirus permanecen activos en el cuerpo humano.