La industria ciberofensiva israelí, a pesar de enfrentar desafíos y controversias, sigue adaptándose y dejando su huella en el escenario global, mientras las implicaciones éticas de sus acciones generan debate en todo el mundo.
Israel, un jugador clave en ciberataques
El sector privado de ciberataques en Israel ha captado la atención mundial en los últimos años, con 74 gobiernos contratando a empresas comerciales para obtener tecnología de espionaje digital. Sin embargo, la inclusión de NSO Group y Candiru en la lista negra del Departamento de Comercio de EE. UU. ha generado controversia. A pesar de las sanciones, el establecimiento de defensa israelí respalda firmemente al sector, contando con apoyo bipartidista.
Europa al rescate de las empresas de ciberespionaje
Aunque el gobierno israelí ha sido criticado por su supuesta falta de apoyo, empresas como NSO Group han encontrado respaldo en Europa.
A pesar de las sanciones estadounidenses, correos electrónicos exclusivos revelan agradecimientos de clientes europeos a NSO por su asistencia. NSO, en un giro inesperado, se ha centrado en ciberdefensa tras sufrir las consecuencias de la lista negra.
Nuevos competidores emergen en la industria
La caída de NSO ha dejado espacio para nuevos competidores que buscan captar el negocio de los estados autocráticos.
Tal Dilian, exintegrante de la inteligencia militar israelí, ha sido señalado por no tomar medidas para prevenir violaciones de derechos humanos. Dilian ha utilizado tecnologías de piratería y guerra psicológica en nombre de varios países.
La UE dividida frente al espionaje cibernético
La UE está dividida entre países que buscan una mayor supervisión de las empresas de ciberataques y aquellos que son refugios para compañías de espionaje.
Esto genera un juego inútil de “golpear al topo”, donde las empresas simplemente se reorganizan bajo un nuevo nombre o lugar. Team Jorge, un equipo israelí acusado de manipular más de 30 elecciones, es un ejemplo de esta problemática.
Guerra cibernética y dilemas éticos
Las regulaciones de licencias de exportación son solo una fracción de la solución, ya que productos cibernéticos pueden ser transportados y etiquetados fácilmente como “sistemas de gestión de tráfico de red”.
Empresas israelíes han vendido sus productos sin licencia o a través de intermediarios en otros países. ¿Reemplazarán las compañías estadounidenses a las israelíes?
Medios de comunicación y guerra psicológica
Team Jorge, en colaboración con Demonan International, ha utilizado medios de comunicación y guerra psicológica para influir en elecciones y clientes corporativos.
¿Serán los funcionarios de la UE capaces de bloquear las distorsiones rusas, especialmente si están vinculadas a actividades sancionables en Ucrania?
¿Cómo mantener el equilibrio en el campo de batalla cibernético?
Israel enfrenta un dilema al tratar de permitir ciberataques contra “los malos” y al mismo tiempo frenar actividades similares. A pesar de las dificultades, Israel podría estar dispuesto a aceptar situaciones embarazosas y desafíos ocasionales para mantenerse a la vanguardia en la guerra cibernética.
Aunque NSO Group ha logrado estabilizarse y sobrevivir, otros competidores israelíes podrían tomar su lugar.
Reflexiones sobre el futuro del sector cibernético en Israel
La industria cibernética israelí se enfrenta a un futuro incierto, entre la necesidad de regulación y la búsqueda de supervivencia en un mercado altamente competitivo.
Israel deberá encontrar un equilibrio entre proteger los derechos humanos, mantener la seguridad nacional y respaldar a sus empresas en el ámbito internacional.
Este desafío no solo afecta a Israel, sino también a la comunidad global, que debe abordar el auge del espionaje cibernético y sus consecuencias en la política, la economía y la sociedad.