Recibir una vacuna contra el coronavirus no perjudica los óvulos, como tampoco lo hace contraer el COVID-19, según concluyen investigadores israelíes en un estudio que podría tranquilizar tanto a quienes dudan de la vacuna como a las pacientes recuperadas.
Estudiaron los ovarios de mujeres sometidas a FIV y vieron que no había diferencias en la función de las mujeres según estuvieran vacunadas o no, o según estuvieran o no infectadas.
La Dra. Anat Hershko, directora de FIV en el Hospital Hadassah del Monte Scopus de Jerusalén, estudió la función ovulatoria de las mujeres sometidas a tratamiento. No hubo diferencias en la función entre las mujeres vacunadas con las inyecciones de Pfizer y las no vacunadas, informó, afirmando que esto constituye un replanteamiento de las falsas afirmaciones de que las vacunas perjudican la fertilidad.
“Es la primera vez que se presenta en un estudio un hallazgo tan importante sobre la fertilidad femenina y la vacuna”, dijo Hershko, cuya investigación se ha publicado en Internet pero aún no ha sido revisada por expertos.
Y añadió: “Es un estudio preliminar y pequeño, pero ni siquiera vimos una tendencia, así que parece que estamos en terreno seguro”. Se parte de la base de que si no hay diferencias en el funcionamiento de los ovarios de las mujeres cuando son estimuladas para la FIV, tampoco habrá diferencias en los ciclos mensuales regulares.
Aunque el estudio sugiere que contraer el COVID-19 no causa un daño específico a los ovarios que repercuta en su funcionamiento tras la recuperación, el virus ha causado graves daños a la salud general de las mujeres embarazadas, incluida la muerte de una madre y un feto en Hadassah. Hershko expresó su esperanza de que su estudio anime a las mujeres embarazadas o que intentan concebir a vacunarse.
El estudio de 32 pacientes descubrió que los anticuerpos COVID-19 sí llegaban a los ovarios tanto en las mujeres vacunadas como en las pacientes recuperadas, pero no observó ningún impacto negativo tras comprobar indicadores clave como los niveles hormonales, la calidad del fluido que rodea al óvulo en un folículo ovárico y la relación entre el estrógeno y el número de óvulos.
“Muchas mujeres en edad reproductiva, especialmente las que tienen dificultades para concebir, han expresado su preocupación por la vacuna y les ha preocupado que pueda reducir la fertilidad y la eficacia del tratamiento de fertilidad. Pero este estudio asegura que la calidad del proceso ovulatorio no se ve perjudicada en modo alguno”.
“Teniendo en cuenta esto, y el hecho de que la infección por coronavirus puede ser perjudicial durante el embarazo hasta el punto de que hemos visto complicaciones graves en mujeres embarazadas que estaban infectadas por [el coronavirus], e incluso muertes, se debería animar a la gente a tomar la vacuna antes del embarazo”.