El lunes por la noche, se produjo un acto de vandalismo en la Tumba de José, ubicada en Siquem (Nablús), en el que vándalos árabes palestinos ingresaron y causaron daños significativos.
La ner tamid, una lámpara que arde perpetuamente cerca del arca en la tumba, fue destrozada, al igual que el cofre que la rodea. Además, cortaron la corriente en el lugar.
Según los informes, el resto de la tumba quedó intacto, pero los daños causados a la lámpara y el cofre son motivo de preocupación para la comunidad israelí. Ante esta situación, el jefe del Consejo Regional de Samaria, Yossi Dagan, se encuentra en constante comunicación con el comandante de la Brigada de Samaria, el coronel Shimon Siso, para abordar la situación y tomar las medidas necesarias.
Dagan expresó su consternación ante este acto de vandalismo y afirmó que solo el Estado de Israel y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) pueden proteger la Tumba de José, un lugar sagrado para el pueblo de Israel. Hizo referencia al abandono de la tumba por parte de Ehud Barak hace 23 años como un acto cobarde e irresponsable cometido por el Estado de Israel, y subrayó la importancia de corregir esta situación.
En sus declaraciones, Dagan destacó que la Autoridad Palestina no debería ser la encargada de custodiar los lugares sagrados de Israel, y enfatizó la necesidad de que el Estado de Israel asuma la responsabilidad de proteger la Tumba de José de manera efectiva.