La noche del viernes, dos misiles lanzados por presuntos islamistas hutíes de Yemen impactaron un barco en el Golfo de Adén, aunque cayeron cerca de la embarcación sin causar daños significativos, según reportaron las autoridades.
Este incidente ocurre tras varios ataques recientes por parte de los hutíes, incluyendo un asalto a un petrolero con bandera griega en el mar Rojo, donde colocaron y detonaron explosivos. Ese ataque, considerado el más grave de las últimas semanas, generó preocupaciones sobre un posible derrame de petróleo significativo. Los ataques de los rebeldes han alterado el tránsito de mercancías en el mar Rojo, una ruta vital por la que cada año se transportan bienes valorados en un billón de dólares. Además, la guerra entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza ha complicado aún más la situación, afectando el envío de ayuda humanitaria a zonas en conflicto como Sudán y Yemen.
En cuanto al ataque del viernes, los misiles “detonaron muy cerca del buque”, aproximadamente a 240 kilómetros al este de Adén, de acuerdo con el centro de operaciones comerciales marítimas del Reino Unido, vinculado al ejército británico.
La UKMTO (United Kingdom Maritime Trade Operations) informó que la tripulación del barco se encuentra a salvo y que la nave continúa su rumbo hacia el siguiente puerto de escala. Las autoridades han señalado que “las investigaciones están en curso” para esclarecer los detalles del ataque.