Una fuente del grupo terrorista palestino Hamás afirmó el sábado que un alijo de armas que explotó en el sur del Líbano tenía fines “defensivos”.
Algunos informes afirmaron que hasta 12 personas murieron en la explosión del viernes por la noche, mientras que otros negaron que hubiera víctimas mortales. Se informó de una docena de heridos.
Una fuente de Hamás dijo al periódico libanés Al-Akhbar que la explosión fue causada por un incendio. El periódico manifestó que los fiscales han abierto una investigación sobre las circunstancias que rodean la explosión.
Las armas almacenadas para el grupo terrorista explotaron en el campo de refugiados de Burj Shamali, en la ciudad portuaria de Tiro, el viernes por la noche.
Un funcionario de seguridad libanés expresó el viernes que las autoridades no tenían un número exacto de víctimas, pero que podría haber hasta 12 muertos.
Sin embargo, la agencia de noticias Reuters informó el sábado de que los medios de comunicación locales y los trabajadores de la defensa civil que se encontraban en el lugar de los hechos, así como una fuente de seguridad, negaron que hubiera habido víctimas mortales en la explosión.
Los informes iniciales decían que el fuego se había iniciado en un camión cisterna de gasóleo y se había extendido a una mezquita cercana controlada por el grupo terrorista palestino.
El fuego provocó la explosión de algunas armas que parecían estar almacenadas dentro de la mezquita, según los residentes.
Según los informes, el ejército acordonó la zona, impidiendo que la gente entrara o saliera del campo.
Los vídeos publicados en las redes sociales mostraban explosiones prolongadas en la zona.
El fuego prendió algunas de las armas que parecían estar almacenadas en el interior de la mezquita, declararon los residentes.
La Agencia Nacional de Noticias, de carácter estatal, dijo que el fiscal del sur del Líbano ha pedido a las agencias de seguridad y a los expertos en armas que inspeccionen el lugar de almacenamiento de armas, y añadió que el lugar no estaba afiliado al grupo terrorista Hezbolá, que controla gran parte del sur del Líbano.
La semana pasada, el periódico Yedioth Ahronoth informó de que Hamás había creado discretamente en los últimos años una rama libanesa de su grupo terrorista con base en Gaza para abrir un frente adicional contra Israel en futuros conflictos.
La rama tiene su sede en Tiro, pero se cree que tiene otros puestos de avanzada en todo el país, según Yedioth.
La primera salva de la rama libanesa se produjo durante el conflicto de 11 días entre Israel y Hamás el pasado mes de mayo, cuando se lanzaron cuatro cohetes contra el norte de Israel desde el Líbano, según Yedioth. En ese momento, las FDI atribuyeron el fuego a “facciones palestinas”.
La decisión de establecer la rama del Líbano se tomó en 2014 después de otra guerra en Gaza ese verano, durante la cual los líderes de Hamás se encontraron aislados en la lucha contra Israel, dijo el informe. El grupo terrorista decidió que se formaría una nueva rama y que estaría supeditada al liderazgo de Hamás.
La formación de los combatientes corre a cargo de agentes iraníes no identificados y sus miembros se centran actualmente en la construcción de más cohetes caseros con un alcance de decenas de kilómetros, según el informe.
El grupo terrorista chiíta Hezbolá, que controla gran parte del sur del Líbano, está al tanto de las operaciones de la rama suní y les ha dado luz verde. Sin embargo, Hezbolá tiene poder de veto sobre las actividades de la rama de Hamás, según el informe.
Líbano acoge a decenas de miles de refugiados palestinos y sus descendientes. Muchos de ellos viven en los 12 campos de refugiados que hay repartidos por el pequeño país mediterráneo.
Por un acuerdo de larga data, el ejército libanés no entra en los campos, dejando la seguridad en el interior a las facciones palestinas.