Documentos de inteligencia iraníes filtrados revelaron que la Hermandad Musulmana y el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) de Irán buscaban trabajar juntos. Como un puño de hierro en un guante de terciopelo, el CGRI sería el músculo y la Hermandad podría darle cobertura en los 85 países en los que trabaja, comentaron miembros de las organizaciones. Se reunieron en Turquía en 2014 para discutir cómo podrían trabajar juntos y contra quién luchar. Primer objetivo: Arabia Saudita. Otros enemigos comunes: Israel y Estados Unidos.
Las revelaciones provienen de algunos de los 700 documentos que se filtraron del Ministerio de Inteligencia y Seguridad iraní a The Intercept y The New York Times, que han estado publicando historias sobre los documentos. La filtración revela que la Hermandad Musulmana, una organización religiosa islámica sunita arraigada en Egipto con sucursales en otros países que ha inspirado a numerosos grupos islamistas de extrema derecha, incluido Hamás, quería trabajar con la dirección religiosa de extrema derecha de Irán.
El abrazo de estos dos grupos en 2014 parece ir en contra de la narración de que los extremistas religiosos sunitas y chiítas no se llevan bien. Pero la región no es tan simple, y de hecho, vieron áreas de cooperación. En primer lugar, la Hermandad Musulmana llegó al poder en Egipto en 2012, pero fue barrida del poder en 2013 por Abdel Fatah al-Sisi. Mientras sus miembros eran detenidos, otros se acercaron a Irán. Esto fue en la primavera de 2014. ¿Se podría organizar una reunión?
El CGRI de Irán estaba tan ansioso que dijo que enviaría al General de División. Qassem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds del CGRI. La Hermandad quería reunirse en Turquía, donde sus aliados del partido gobernante AKP estaban en el poder. Hamás también fue bien recibido en Turquía, y Turquía, bajo la presidencia de Recep Tayyip Erdogan, había sido un defensor clave de Mohammed Morsi de la Hermandad en Egipto. Turquía se enfureció porque Sisi expulsó a Morsi del poder. Arabia Saudita había apoyado a Sisi.
Aquí está la realidad de la región en ese año. A Turquía no le importó que se celebrara la reunión, pero Soleimani tenía un perfil demasiado alto. En su lugar se envió a un miembro del CGRI llamado “Abu Hussain”. Se seleccionó un hotel turco. Los hermanos, dice The Intercept, enviaron a “Ibrahim Munir Mustafa, Mahmoud al-Abiary y Youssef Moustafa Nada”. Pero Nada le dijo a The Intercept que nunca asistió a la reunión.
Lo importante es que mientras se decía al mundo que los sunitas y chiítas luchaban entre sí en lugares como Siria, Líbano o Irak, la extrema derecha religiosa de estos grupos estaba dispuesta a trabajar junta. ¿Cómo podría pasar eso?
Podrían trabajar contra el “enemigo común” de Arabia Saudita. La Hermandad había hecho grandes avances en Arabia Saudita. Pero en los últimos años, ha sido cuestionada. Los Emiratos Árabes Unidos comenzaron a tomar medidas enérgicas contra ella en 2011 y Arabia Saudita la siguió, calificándola de “organización terrorista” en 2014. Estados Unidos designó a Hasm y Liwa al-Thawra, hijos de la Hermandad, según la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, como organizaciones terroristas en 2018.
En 2014 la Hermandad Musulmana y el CGRI dijeron que podrían cooperar en Yemen. Esta es una gran revelación porque Arabia Saudita no intervino en Yemen hasta 2015 para detener a los rebeldes Hutíes. La represión de la Hermandad Musulmana es vista en gran medida como parte del enfoque del Príncipe Heredero Mohammed Bin Salman, así como de la guerra en Yemen. Pero esto muestra que en realidad la Hermandad y el CGRI ya estaban tramando antes de que MBS reaccionara.
“La delegación de la Hermandad dijo que ambas partes podrían unir sus fuerzas contra los saudíes. El mejor lugar para hacerlo fue en Yemen”, dijeron, según el informe de The Intercept. Escalarían con los hutíes contra el gobierno respaldado por Arabia Saudita. Los Hermanos trabajarían con las tribus y el CGRI con los Hutíes.
También podrían trabajar juntos en Irak. El enemigo no especificado allí sería Estados Unidos. El CGRI ya estaba trabajando contra Estados Unidos en Irak. La Hermandad podría ayudar a reducir las tensiones con la comunidad sunita.
No se sabe lo que salió de la reunión, pero hubo indicios de más discusiones en Turquía o Beirut. Los detalles de la reunión muestran que estas dos importantes organizaciones parecían dispuestas a discutir diferentes intereses compartidos. Esto es parte de una red más amplia en la que la CGRI de Irán está dispuesta a trabajar con grupos como Hamás o los talibanes cuando les sirve a sus intereses, a pesar de que están ostensiblemente en contra de otros grupos jihadistas sunitas más extremistas.
Tienen intereses y enemigos comunes, y ambos tienen una visión del mundo arraigada en la teocracia religiosa. Mientras que a la Hermandad a menudo le gusta usar las urnas y el islam político para ganar poder, trabajando a ambos lados de la valla pareciendo moderados pero también teocráticos, el CGRI también usa métodos diferentes para ganar influencia. El CGRI trabaja con grupos como Hezbolá y las Unidades de Movilización Popular en Irak. En cada caso, crea un mini-CGRI, con un partido político y un grupo armado. Luego se inserta en sistemas democráticos para apoderarse lentamente de parte del Estado.