Terrorismo

La amenaza de Saleh al-Arouri se produjo después de que el gabinete de seguridad israelí se reuniera la semana pasada tras varios atentados terroristas.

Si se retirara la pena de muerte, que ya ha sido aplazada demasiado tiempo, por ese acto atroz, estaríamos constatando una de las injusticias más crueles de la historia de la jurisprudencia.

Hamzeh Abu Zeila, un joven de 19 años de Rahat, fue detenido tras una operación conjunta de la policía y el Shin Bet.

Meir Schechter, director de la administración local, pidió al gobierno que tomara decisiones: “Ha llegado el momento de que nuestros enemigos sepan que hay un precio”.

Es común que tras estos actos, la organización responsable divulgue nombres e imágenes del autor y en ocasiones videos del atentado.

La ministra de Asuntos de Asentamientos, Orit Strock, dijo: “Las carreteras de Judea y Samaria no deben seguir siendo una vía verde para el terrorismo”.

La hija de Nigri, de seis años, estaba en el asiento trasero y presenció el asesinato de su madre en Hebrón.

El atentado del lunes se produce dos días después de que dos hombres fueran asesinados en otro ataque terrorista a tiros en Huwara.

El Magen David Adom informaron que Batsheva Nigri, madre de tres y profesora de guardería en Beit Hagai, murió en el lugar.

El ministro de Defensa, Yoav Gallant, condenó el ataque y prometió justicia.