Un político argentino de izquierdas podría enfrentarse a las acciones legales iniciadas el jueves por las comunidades judías de Argentina tras sus comentarios antisionistas y antisemitas, que incluyen la afirmación de que todos los sionistas son nazis.
En varios tuits publicados a lo largo del mes de mayo, el secretario general del Partido Socialista de los Trabajadores, Alejandro Bodart, acusó a Israel de ser un “Estado genocida”.
En un tuit con motivo del Día de la Nakba, el 16 de mayo, Bodart pidió que se liberara una Palestina “laica y democrática” “desde el río hasta el mar”, lo que implica que aboga por borrar a Israel del mapa. Además, como ya se ha mencionado, Bodart escribió en un tuit ahora borrado que todos los sionistas son “nazis”.
En una declaración publicada en su cuenta de Twitter el lunes, la organización paraguas Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), o la “Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas”, condenó los comentarios antisionistas de Bodart, diciendo que sus comentarios posiblemente violaron una ley argentina contra la discriminación, así como la definición de antisemitismo de la IHRA, que fue adoptada por Argentina en 2020.
Los comentarios de Bodart “trivializaron explícitamente el Holocausto al comparar el sionismo con el nazismo y llamaron a la destrucción de Israel, al que calificó de estado ‘genocida y racista’”, dice el comunicado. Según la DAIA, Bodart promueve un mensaje de odio que “amenaza la convivencia democrática”.
La DAIA, a través de su departamento jurídico, tratará de investigar si los comentarios de Bodart constituyen una violación de la ley argentina, dijo la organización.
La respuesta de Bodart
En respuesta, Bodart prometió seguir expresando su apoyo a los palestinos en medio de los intentos de “silenciarlo”.
En una declaración propia, Bodart afirmó que “el autoritarismo es un componente intrínseco del sionismo” y añadió que la única solución al conflicto palestino-israelí es “destruir Israel para “reconstruir” el Estado de Palestina”.
El Partido Socialista de los Trabajadores de Bodart, que se presenta a las elecciones argentinas en una facción unida con otros tres partidos de izquierda conocida como el Frente de Izquierda de los Trabajadores, solo obtuvo dos de los 127 escaños de la Cámara de Diputados del país sudamericano, la cámara baja del congreso argentino.
Curiosamente, el Frente de Izquierda de los Trabajadores designó a Myriam Bregman, que se identifica como judía atea, como su candidata a la vicepresidencia en las elecciones presidenciales de 2015, que el partido perdió.