JTA – Hace sólo unos años, se esperaba que Omán fuera el siguiente en la lista, después de Marruecos, Sudán, Bahréin y Emiratos Árabes Unidos, en firmar los acuerdos de normalización de los Acuerdos de Abraham con Israel.
El viernes, el parlamento de Omán votó a favor de criminalizar cualquier relación o interacción con “la entidad sionista”.
Aunque no se han hecho públicos los detalles exactos, la nueva ley parece ser de aplicación general.
“Los hermanos, Excelencias, analizaron el desarrollo que estaba teniendo lugar, ya fuera técnico, cultural, económico o deportivo, y propusieron enmiendas adicionales que incluyen la ruptura de cualquier relación económica, deportiva o cultural y la prohibición de tratar de cualquier forma o medio, ya fuera una reunión real, una reunión electrónica o cualquier otra cosa”, declaró Yaqoub Al-Harithi, vicepresidente del Parlamento omaní, sobre el proyecto de ley, según la agencia de noticias omaní WAF.
El sultanato situado en el extremo sur de la península arábiga, donde el océano Índico se encuentra con el golfo Pérsico, estuvo durante mucho tiempo más cerca de Israel que otros Estados de la región. Omán nunca participó en ninguna guerra con el Estado judío y estableció relaciones comerciales no oficiales con Israel a principios de la década de 2000.
El sultán omaní Qaboos Bin Said recibió en su país a tres primeros ministros israelíes: Isaac Rabin en 1994, Shimon Peres en 1996 y Benjamin Netanyahu en 2018. La visita de Rabin fue la primera de un primer ministro israelí a una nación del Golfo.
Bajo el liderazgo de Qaboos, Omán se hizo un hueco como la Suiza de Oriente Próximo, capaz de tratar simultáneamente con países como Israel, Irán, Arabia Saudita, Qatar y Yemen, todo ello manteniendo un sentido de neutralidad. El país ha sido un importante intermediario en todo, desde las conversaciones nucleares iraníes hasta las negociaciones sobre la guerra civil yemení.
¿Qué ha ocurrido?
El sultán Qaboos, que fue el gobernante que más tiempo reinó en el Estado independiente más antiguo de Oriente Próximo, murió en 2020 sin herederos. El poder pasó a su primo Haitham Bin Tariq.
Aunque el sultán Haitham anunció en su toma de posesión que seguiría los pasos pacificadores de su predecesor, se ha acercado a Irán, que financia grupos terroristas en toda la región.
Mientras Arabia Saudita abrió su espacio aéreo a los vuelos israelíes a principios de año, Omán se ha resistido a abrir el suyo, bloqueando la ruta más directa para algunos vuelos de Israel a Asia. Con ello, Omán ha recibido presiones de la administración del presidente estadounidense Joe Biden para que abra sus cielos.
Sin embargo, los acontecimientos a los que Al-Harithi se refiere en su declaración podrían incluir el ascenso del nuevo gobierno de derechas, ultraderechista y religioso de Israel, que ya ha provocado la ira mucho más allá de Oriente Próximo.