El primer ministro Benjamin Netanyahu está previsto que convoque una reunión en su oficina de Jerusalén el sábado por la tarde para discutir las medidas más estrictas que Israel podría adoptar para detener la pandemia de coronavirus.
Netanyahu se reunirá con las autoridades pertinentes, incluyendo los ministerios de salud y finanzas, a las 4:00 p.m. después de lo cual probablemente hará una declaración más tarde en el día anunciando cualquier nueva directiva, de acuerdo con los informes de los medios hebreos.
Las medidas más estrictas podrían incluir la transición del personal en los lugares de trabajo considerados no esenciales para trabajar desde casa, limitar aún más las reuniones y el movimiento públicos y cerrar centros comerciales y otros lugares, y posiblemente cerrar los jardines de infancia y las guarderías privadas, además de las escuelas y universidades que se ordenó cerrar por lo menos durante el mes siguiente.
Un alto ministro dijo al sitio de noticias de Ynet que, actualmente, “la tendencia es una desaceleración de la economía, no un cierre”.
Se dice que los funcionarios están trabajando para determinar cuántos trabajadores israelíes serán clasificados como no esenciales, según Ynet.
El Ministerio de Salud está presionando para un cierre completo, según el informe, y Netanyahu tendrá que decidir sobre el próximo curso de acción.
Según un informe sin fuente (en hebreo) del canal de noticias N12, el Ministerio de Salud está buscando incluir una directiva en la que no más de dos personas estarían juntas en una habitación para limitar el contacto, así como una suspensión completa del sistema de transporte público y del sistema educativo.
Se dice que los directores generales de los ministerios pertinentes han mantenido conversaciones maratónicas durante la noche del viernes al sábado en la sede del Ministerio de Finanzas en Jerusalén para analizar los escenarios en los que se produce un cierre completo con solo los servicios esenciales en funcionamiento. Las conversaciones se centraron en la elaboración de ciertos detalles, como la forma en que los soldados de las FDI debían llegar a sus bases y si debían cerrar los internados que no estaban incluidos en la directiva a partir del jueves por la noche, que cerraban las escuelas desde el primer grado hasta la secundaria, así como las universidades.
El número de casos confirmados de coronavirus en Israel subió a 164 hasta el sábado por la tarde, 21 más que el viernes, con casi 40.000 actualmente en cuarentena domiciliaria, según el Ministerio de Salud israelí. De los que tienen el virus, dos siguen en estado grave, 10 en estado moderado y cuatro se han recuperado.
Israel no ha visto ninguna muerte por el virus.
De los 164 casos confirmados, 124 personas han sido hospitalizadas y 27 han recibido atención médica en sus casas. Unas 38.000 están en autocuarentena, entre ellas casi 1.000 médicos, más de 600 enfermeras, 170 paramédicos y 80 farmacéuticos, según las cifras del Ministerio de Salud.
El país ha adoptado una serie de medidas de gran alcance para contener y combatir el virus, pero hasta ahora no ha tomado medidas como la prohibición de todos los viajes nacionales no esenciales o la orden de cierre de la mayoría de los negocios.
A partir del miércoles se han prohibido las reuniones públicas de más de 100 personas, lo que ha llevado a la cancelación de los juegos deportivos y otros numerosos eventos, así como al cierre de teatros y muchos hoteles.
Esta orden, que entró en vigor el jueves, se aplica a bodas, bar mitzvahs y funerales, y cubre “tanto los espacios cerrados como los abiertos”, según el Ministerio de Sanidad.
La regulación también ha impactado la vida religiosa, con el Jefe Sefardí, el rabino Yitzhak Yosef, pidiendo a los israelíes que eviten las grandes reuniones de oración en el Muro Occidental y diciendo que las directivas del Ministerio de Salud deben ser tratadas como la ley judía “a todos los efectos”.
La policía anunció el viernes que estaban llevando a cabo cientos de inspecciones para asegurar el cumplimiento de la prohibición de reuniones de más de 100 personas.