Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) comunicaron el martes que Hashem Safieddine, un alto dirigente de Hezbolá, murió en un ataque aéreo realizado por Israel en Beirut a inicios de este mes.
Se consideraba a Safieddine, quien ocupaba el cargo de jefe del consejo ejecutivo de Hezbolá, como un posible sucesor de Hassan Nasrallah tras su eliminación a finales de septiembre.
De acuerdo con la información del ejército israelí, Safieddine murió junto a Hussein Ali Hazima, el responsable de la división de inteligencia del grupo terrorista libanés, durante el ataque llevado a cabo el 4 de octubre.
El objetivo del ataque fue la instalación de inteligencia subterránea de Hezbolá ubicada en Beirut, la cual, según el ejército, se hallaba “en el corazón de una población civil” en el suburbio del sur de la capital libanesa, conocido como Dahiyeh.
Las FDI sostienen que, en el momento del ataque, más de 25 integrantes de la división de inteligencia de Hezbolá estaban presentes en la sede, incluyendo a otros comandantes de alto nivel.
Desde el ataque, no se había podido establecer comunicación con Safieddine, pero el martes las FDI confirmaron su fallecimiento. Hasta el momento, Hezbolá no ha realizado un anuncio oficial sobre su muerte.
El teniente general Herzi Halevi, jefe del Estado Mayor de las FDI, declaró en un comunicado del ejército: “Hemos contactado a [Hassan] Nasrallah, su sustituto, y a la mayor parte de los líderes de Hezbolá. Sabremos cómo llegar a cualquiera que amenace la seguridad de los ciudadanos de Israel.”
Hashem Safieddine, ex alto cargo de Hezbolá, tenía vínculos con Irán
Designado como terrorista por el Departamento de Estado de Estados Unidos en 2017, Hashem Safieddine era primo de Hassan Nasrallah. Al igual que su primo, Safieddine era clérigo y se caracterizaba por usar un turbante negro que simbolizaba su supuesta descendencia del profeta Mahoma. Con barba gris y anteojos, su parecido con Nasrallah era notable, aunque era varios años más joven, con una edad estimada entre 50 y 60 años.
A principios de octubre, una fuente cercana a Hezbolá comentó a la AFP que Safieddine, conocido por su profunda religiosidad y sus buenas relaciones con Irán, el país que respalda a Hezbolá, era el candidato “más probable” para asumir el liderazgo del partido.
Además de su función como líder del consejo ejecutivo, que gestiona los asuntos financieros y administrativos de Hezbolá, Safieddine también fue designado miembro del Consejo de la Yihad, el órgano encargado de sus operaciones militares.
Durante el último año, Safieddine desempeñó un papel prominente como portavoz de Hezbolá, participando en funerales y eventos que Nasrallah había eludido por cuestiones de seguridad. Tras el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre, fue el primer funcionario de Hezbolá en dirigirse al público, manifestándose en una manifestación en los suburbios del sur de Beirut el 8 de octubre de 2023, donde declaró: “Las armas y nuestros cohetes están con ustedes. Todo lo que tenemos está con ustedes”.
Hezbolá intensifica ataques contra Israel en medio de la guerra en Gaza
El mismo día en que Safieddine pronunció su discurso, las fuerzas aliadas con Hezbolá iniciaron ataques contra comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera, una acción que se ha mantenido casi a diario. La organización, respaldada por Irán, sostiene que sus acciones son en apoyo a Gaza, que se encuentra inmersa en una guerra.
Después del ataque de Hamás del 7 de octubre, aproximadamente 60,000 residentes fueron evacuados de las localidades del norte, cercanas a la frontera con el Líbano, debido a los temores de un ataque similar por parte de Hezbolá y al incremento de los lanzamientos de cohetes por parte del grupo terrorista.
Desde octubre de 2023, los ataques contra el norte de Israel han causado la muerte de 29 civiles. Además, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han informado que 45 soldados y reservistas han perdido la vida en enfrentamientos transfronterizos y en la subsiguiente operación terrestre que se inició en el sur del Líbano a finales de septiembre.
Las FDI estiman que más de 1,500 miembros de Hezbolá han muerto en el transcurso de la guerra. También se reporta que alrededor de 100 integrantes de otros grupos terroristas han muerto en el Líbano, junto con cientos de civiles.
Hezbolá ha divulgado la cifra de 516 de sus miembros que han muerto a manos de Israel durante los combates, la mayoría en Líbano, aunque algunos también en Siria. No obstante, estas cifras no se han actualizado de manera sistemática desde que Israel lanzó una nueva ofensiva contra Hezbolá en septiembre.
El total de muertes causadas por las Fuerzas de Defensa de Israel en su ofensiva terrestre contra Hezbolá en el Líbano, así como durante las operaciones en la frontera, asciende a 19.