Durante una operación en la ciudad de Nablus a primera hora del jueves, un soldado israelí resultó herido leve cuando otro militar disparó por error su arma dentro de un vehículo militar. La protección que le proporcionaba su chaleco antibalas evitó que muriera.
Tras realizar una primera investigación, las Fuerzas de Defensa de Israel concluyeron que el accidente tuvo lugar cuando los miembros de la brigada del ejército Givati estaban terminando una escolta militar de fieles a la Tumba de José.
Días antes, el soldado israelí Nathan Fitoussi, de 20 años, había regresado a su puesto de guardia cerca de la ciudad palestina de Tulkarem y murió de un disparo tras ser confundido con un peligro. Este suceso se produjo en medio de informes sobre violaciones similares de la seguridad operativa.
El jueves por la mañana, un informe interno de las FDI afirmaba que mientras subía a un vehículo blindado Panther, uno de los soldados disparó accidentalmente su arma, alcanzando al soldado que tenía enfrente.
Según el artículo, el blindaje cerámico del soldado detuvo la bala y probablemente le salvó la vida, pero sufrió heridas leves en el pecho.
La investigación original de las FDI concluyó que los soldados habían entrado en el camión con sus armas cargadas, como es habitual en las operaciones en Judea y Samaria.
Uno de los soldados gritó a sus compañeros que comprobaran que sus seguros estaban en posición de apagado antes de subir al vehículo blindado. Según el informe, “todos se aseguraron, incluido el soldado” que disparó accidentalmente.
Las circunstancias que rodean el disparo involuntario o la activación del seguro del arma del soldado siguen siendo un misterio. Las FDI han prometido llevar a cabo investigaciones adicionales sobre el asunto.
Miembros de las Fuerzas de Defensa de Israel han sido destacados en la Tumba de José en Nablus para garantizar la seguridad de los peregrinos judíos que visitan el lugar. En un comunicado, las FDI confirmaron que durante la visita, las fuerzas intercambiaron disparos con terroristas palestinos. Según los informes, un adolescente palestino murió y decenas más resultaron heridos.
Los enfrentamientos son frecuentes durante estas visitas, y los palestinos suelen atacar a las tropas con piedras, cócteles molotov e incluso disparos.