El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Yair Lapid (Yesh Atid), se reunirá el lunes con el enviado especial de Estados Unidos para Irán, Robert Malley.
Malley encabeza una delegación de varias agencias de Estados Unidos. Según Israel Hayom, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, ha decidido no reunirse con él, para enviar el mensaje de que Israel se opone a la política estadounidense de alcanzar un nuevo acuerdo con Irán. Sin embargo, además de Lapid, Malley se reunirá con altos funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores, del Consejo de Seguridad Nacional y del escalafón de defensa de Israel.
Se espera que Malley presente las razones de Estados Unidos para un nuevo acuerdo con Irán, mientras que los israelíes expresarán su firme oposición a cualquier acuerdo con los ayatolás, exigiendo que Estados Unidos aumente las sanciones contra ellos.
Según Israel Hayom, a pesar del objetivo de EE.UU. de llegar a un acuerdo casi a cualquier precio, las partes también discutirán la posibilidad de que no se llegue a un acuerdo.
En los últimos meses, la administración ha empezado a interiorizar poco a poco que la posibilidad de llegar a un acuerdo con Irán no es alta, y que su única razón para aceptar las conversaciones es ganar tiempo. Por esta razón, Estados Unidos y sus aliados, incluido Israel, han comenzado a “flexionar sus músculos”, realizando varios ejercicios militares y publicándolos.
Al mismo tiempo, Israel sigue trabajando para convencer a Estados Unidos de que adopte una postura más dura con mayor rapidez, y eso es lo que se discutirá en las reuniones.
La voluntad de Irán de reanudar las conversaciones de Viena dio a EE.UU. la esperanza de un nuevo acuerdo, pero la administración entiende que un acuerdo no es seguro, y por lo tanto se está preparando para un escenario en el que no se llegue a un acuerdo. Israel tiene la intención de sugerir varias ideas sobre qué hacer en tal escenario, y entre esas sugerencias ocupa un lugar central el aumento de las sanciones a Irán. Al mismo tiempo, Israel ha subrayado que se reserva el derecho a actuar de forma independiente, si lo considera necesario.
Se espera que las conversaciones de Viena sobre un nuevo acuerdo nuclear comiencen a finales de noviembre. Israel está seguro de que el acuerdo de Irán de volver a la mesa pretende ganar tiempo, y que el país no tiene realmente la intención de volver al acuerdo de 2015 ni de alcanzar un nuevo acuerdo.