El F-117 destacó en combate durante Operación Causa Justa en Panamá en 1989 y en la Guerra del Golfo en 1991.
Cazas F-117 Nighthawk reactivados
En el transcurso del verano pasado, se desataron rumores e intrigas en el mundo de la aviación militar cuando surgieron imágenes de cazas F-117 Nighthawk, pertenecientes a las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos, en plena actividad durante un ejercicio en Alaska.
A pesar de que estos aviones han sido mayoritariamente desactivados del servicio, el Congreso estadounidense dictaminó que todos los F-117 inactivos a partir de septiembre de 2006 debían ser preservados para una posible reactivación. Este hecho se corroboró con su aparición en vuelo, demostrando que, incluso después de años, el F-117 Nighthawk conserva su capacidad operativa.
Los aviones en cuestión aterrizaron en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Alaska, para sumarse a las maniobras Northern Edge 23-1, un ejercicio de gran envergadura que se llevó a cabo del 4 al 19 de mayo.
Integración en ejercicios militares de alta magnitud
Este despliegue no fue un hecho aislado. Los F-117 se integraron en una vasta operación que incluyó a cinco buques y más de 150 aeronaves. Este ejercicio, organizado bajo el auspicio del Mando Indo-Pacífico de EE. UU. y dirigido por el Cuartel General de las Fuerzas Aéreas del Pacífico, tuvo como objetivo la integración de múltiples dominios – terrestre, aéreo, marítimo, espacial y ciberespacial – para un entrenamiento conjunto, interinstitucional y multinacional.
Un detalle que captó la atención de los aficionados a la aviación fue que esta fue la primera vez que el F-117 operó desde una base en Alaska. Además, se observó que los aviones estaban equipados con reflectores de radar desmontables, un recurso usado habitualmente para hacer visibles a los aviones en los radares de control del tráfico aéreo. Este equipamiento podría haber sido retirado en momentos en que se necesitara la firma de radar única y menos detectable del Nighthawk, como, por ejemplo, si estos aviones colaboraban con el 18º Escuadrón de Agresores durante los ejercicios.
Además, estos aviones fueron avistados poco tiempo antes en el sur de California, en la ruta de entrenamiento Sidewinder Low-Level, parte del complejo R2508 Range Complex, lo que generó un amplio eco en redes sociales con la difusión de imágenes de la aeronave en vuelo.
Un legado de innovación y misterio en la aviación
El Lockheed F-117 Nighthawk es el resultado de la innovadora y secreta división Skunk Works de la industria aeroespacial y de defensa, conocida oficialmente como Proyectos de Desarrollo Avanzado.
Esta división ha sido responsable del desarrollo de aeronaves emblemáticas como el U-2, el SR-71 Blackbird, el F-22 Raptor y el F-35 Lighting II. Sin embargo, el Nighthawk ostenta el título de ser el primer avión operativo diseñado con tecnología furtiva, manteniendo su existencia en secreto durante seis años, incluso después de estar en servicio activo.
Originalmente diseñado como un caza para contrarrestar las amenazas soviéticas, su relevancia parecía cuestionable con el ocaso de la Guerra Fría, suscitando interrogantes sobre la inversión multimillonaria en su desarrollo.
Un guerrero demostrado: El F-117 en conflicto
El F-117 demostró su eficacia en combate en diciembre de 1989 durante la Operación Causa Justa en Panamá. Posteriormente, su potencial devastador quedó evidenciado durante la Guerra del Golfo en 1991, donde desempeñó un papel crítico desde la primera noche de ataques.
Se concentró en objetivos estratégicos, incluyendo instalaciones de mando y control iraquíes, centros de comunicaciones y lugares de investigación, producción y almacenamiento de armas nucleares y químicas. Además, fue clave en la destrucción de refugios de aviones reforzados en aeródromos iraquíes.
Más de tres décadas después de su participación en la Guerra del Golfo y años después de su retiro oficial, el F-117 Nighthawk sigue demostrando una presencia activa e impactante en el ámbito militar.
El F-117 Nighthawk desempeñó un papel crucial en la Operación Causa Justa en Panamá en 1989. Se centró en atacar objetivos estratégicos con precisión, minimizando los daños colaterales. Su tecnología furtiva permitió que operara con gran efectividad, demostrando la capacidad de Estados Unidos para llevar a cabo misiones en territorios hostiles con riesgos reducidos para sus fuerzas.
Desde su desactivación en 2006, todos los F-117 Nighthawk inactivos se mantienen preservados para una posible reactivación, según dictamen del Congreso estadounidense. Esto se evidenció con su reciente aparición en vuelo, demostrando que, a pesar de los años, estos aviones conservan su capacidad operativa y pueden ser reactivados si es necesario.
El ejercicio Northern Edge 23-1, en el que participaron los F-117, tuvo como objetivo la integración de múltiples dominios – terrestre, aéreo, marítimo, espacial y ciberespacial – para entrenamiento conjunto. Fue una operación a gran escala organizada por el Mando Indo-Pacífico de EE. UU., destacando la flexibilidad y versatilidad del F-117 en diferentes escenarios operativos.
El Lockheed F-117 Nighthawk es pionero en incorporar tecnología furtiva en aeronaves de combate. Diseñado por la división Skunk Works, fue el primer avión operativo diseñado para ser menos detectable por radar, revolucionando la estrategia militar aérea y estableciendo un nuevo paradigma en el diseño de aviones de combate.
El F-117 demostró su eficacia en la Guerra del Golfo en 1991, destacando desde la primera noche de ataques. Se concentró en objetivos estratégicos como instalaciones de mando y control iraquíes y centros de armas nucleares y químicas. Su capacidad de ataque preciso y su tecnología furtiva fueron clave en la destrucción de refugios de aviones iraquíes y en la minimización de daños colaterales.