Como pilar básico de cualquier fuerza aérea occidental, la obtención y el mantenimiento de la superioridad aérea han sido prioritarios en la doctrina militar estadounidense. El Pentágono ha invertido miles de millones de dólares en el desarrollo de fuselajes avanzados en todos los servicios y Estados Unidos se ha beneficiado de tener superioridad aérea sobre sus adversarios durante décadas.
Aunque naciones como China y Rusia han modernizado sus propias capacidades aéreas en los últimos años, ciertas plataformas estadounidenses pilotadas por el Ejército del Aire y la Armada representan algunas de las mejores aeronaves del mundo en todo el planeta.
El F-22 Raptor
El F-22 Raptor, primer caza de quinta generación que surca los cielos, es considerado la plataforma más avanzada en servicio actualmente. El Raptor fue el primer caza operativo en combinar sigilo, supermaniobrabilidad, supercrucero y fusión de sensores en una única plataforma. En 1997, el infame caza de las Fuerzas Aéreas realizó su primer vuelo con el servicio y sigue asombrando a los aficionados a la aviación más de dos décadas después.
La menor sección transversal de radar del Raptor y sus dos motores turbofan F119 de empuje vectorial son quizá las mayores bazas del caza. Su capacidad de vectorización del empuje permite al Raptor superar a cualquier otro caza en un combate aéreo, ya que puede redirigir el flujo de energía que permite al fuselaje hacer las notables acrobacias por las que es conocido.
En cuanto al armamento, el F-22 puede llevar dos misiles aire-aire AIM-9 Sidewinder en sus bahías de armas laterales internas gemelas, además de seis misiles aire-aire guiados por radar AIM-120 AMRAAM o 2 AIM-120 AMRAAM y dos municiones GBU-32 JDAM en su bahía de armas central.
El F-35 Joint Strike Fighter
El nuevo caza estadounidense de quinta generación, el F-35 Lightning II, es sin duda el avión táctico más codiciado del mundo. Los ejércitos extranjeros anhelan tener en sus manos este formidable y sigiloso caza que esencialmente encarna las funciones de tres aviones en una sola plataforma.
El “Joint Strike Fighter” se diseñó inicialmente para sustituir a los F/A-18 y AV-8B Harrier del Cuerpo de Marines de EE. UU., a los F/A-18 de la Marina de EE. UU. y a los A-10 y F-16 de las Fuerzas Aéreas estadounidenses. Dependiendo de la variante, este caza tan versátil puede hacerlo todo, incluidos el despegue y aterrizaje convencionales y los aterrizajes en portaaviones.
El Lightning II es más conocido por su “modo bestia”. Esencialmente, el caza puede cargar municiones en sus pilones de armas externos y convertir la nave en un “camión de bombas”. El modo bestia, sin embargo, compromete la capacidad de sigilo del fuselaje. En modo furtivo, el F-35 está limitado a las armas que puede transportar internamente, protegidas por un fuselaje que evade los radares.
En modo bestia, sin embargo, el F-35 puede llevar casi cuatro veces más armamento utilizando sus montajes externos, que pueden transportar hasta 22.000 libras de armamento. Aunque el Lightning II es un caza relativamente nuevo, ya se han exportado más de 900 unidades, lo que indica la notable popularidad de este avión en todo el mundo.
El B-2 Spirit
Aunque el bombardero furtivo Northrop Grumman B-2 Spirit tiene más de 30 años, la plataforma estratégica sigue siendo una potencia en el cielo. Aunque su anticuado fuselaje será sustituido por el más reciente y avanzado B-21 Raider, este avión sigue siendo hoy en día el bombardero más letal del mundo. Desde su puesta en servicio durante la Guerra Fría, el B-2 ha demostrado su eficacia en numerosas operaciones de combate en lugares que van desde Libia y Kosovo hasta Irak y Afganistán.
El Spirit fue diseñado para penetrar las defensas antiaéreas y sigue siendo la única plataforma reconocida que puede portar grandes armas de alcance aire-superficie en configuración furtiva.
Según las Fuerzas Aéreas, la combinación de las tecnologías de baja visibilidad del Spirit con una alta eficiencia aerodinámica y una mayor carga útil confiere al fuselaje una ventaja significativa sobre otros bombarderos similares. “La baja observabilidad del B-2 se deriva de una combinación de firmas infrarrojas, acústicas, electromagnéticas, visuales y de radar reducidas. Estas firmas dificultan que los sofisticados sistemas defensivos detecten, rastreen y ataquen al B-2. Sin embargo, los materiales compuestos del B-2, sus revestimientos especiales y el diseño de sus alas voladoras contribuyen a su sigilo”.
El B-21 Raider
A principios de este mes, la Fuerza Aérea reveló dos imágenes de su nuevo B-21 Raider durante el Simposio de Guerra de las Fuerzas Aéreas y Espaciales 2023 en Colorado. Como primer componente de la revisión de la disuasión nuclear estadounidense, que costará 1 billón de dólares, se espera que el Raider eleve por sí solo el dominio aéreo del ejército estadounidense.
La plataforma, diseñada por Northrop Grumman, llevará armas convencionales y nucleares, lo que le dará una “ventaja que durará décadas”, según el secretario de Defensa, Lloyd Austin. Similar al F-35 Joint Strike Fighter, el Raider funcionará como un “centro de datos aerotransportado”. Muchos de los detalles que rodean al B-21 Raider siguen siendo clasificados.
El B-52 Stratofortress
Aunque la flota de aviones B-52 de las Fuerzas Aéreas de EE. UU. lleva en servicio casi 70 años, esta formidable plataforma sigue representando el pilar de la flota de bombarderos del servicio. Incluso con la eventual incorporación del B-21 Raider, el Stratofortress seguirá siendo un importante elemento disuasorio para China y otros adversarios de Estados Unidos.
El bombardero tiene un historial honorable, ya que operó durante la Guerra de Vietnam, la Operación Tormenta del Desierto, la Segunda Guerra del Golfo y Afganistán. El B-52 actual puede volar casi 9.000 millas antes de tener que repostar. Además de su capacidad de lanzamiento nuclear, la plataforma puede lanzar misiles de crucero de pie. Se espera que esta plataforma tan antigua surque los cielos hasta la década de 2050.
A medida que se disparan las tensiones entre Estados Unidos y China, aumentan las perspectivas de un futuro conflicto cinético. Las aeronaves estadounidenses poseen una gama de capacidades sofisticadas y únicas; sin embargo, Pekín ha modernizado rápidamente su Fuerza Aérea durante la última década. Estados Unidos ya no es el único productor de fuselajes de quinta generación, lo que hace aún más vital su próxima generación de aviones.