El Ejército del Aire de Estados Unidos ha lanzado oficialmente la búsqueda de un socio estratégico para llevar a cabo el ambicioso proyecto Next Generation Air Dominance (NGAD), con el objetivo de desarrollar un caza de sexta generación que suceda al icónico F-22 Raptor.
Aunque el F-22 sigue siendo una plataforma de superioridad aérea sin paralelo, las Fuerzas Aéreas reconocen la necesidad de adaptarse a los avances tecnológicos en curso y anticipar un futuro en el que el F-22 quedará obsoleto.
Buscando un sucesor para el F-22 Raptor
Conscientes de la importancia de evitar los errores cometidos durante el desarrollo del F-35, las Fuerzas Aéreas han iniciado el proceso de sustitución y han solicitado ofertas confidenciales a los contratistas del sector.
La meta es llegar a un acuerdo de colaboración para el diseño y desarrollo del NGAD a lo largo del año 2024. El Secretario del Ejército del Aire, Frank Kendall, ha dejado claro que el objetivo principal es evitar los retrasos y sobrecostes experimentados durante el programa del F-35.

Lecciones aprendidas del programa del F-35
El programa del F-35 sufrió numerosos contratiempos y desafíos entre el momento en que se adjudicó la licitación del Joint Strike Fighter (JSF) en 2001 y su despliegue operativo en 2018. Estos problemas estuvieron principalmente relacionados con el Rendimiento Total del Sistema (TSP) y la concurrencia.
El enfoque del TSP otorgó a Lockheed Martin, el contratista encargado del proyecto, una mayor flexibilidad en la supervisión y ejecución del diseño y producción del F-35, con el objetivo de reducir redundancias y costos innecesarios. Sin embargo, la falta de supervisión gubernamental llevó a prácticas de desarrollo deficientes, lo que generó retrasos y aumentó los costos del programa.

Retos para el NGAD
Además de los desafíos del TSP, el programa del F-35 también se vio afectado por la concurrencia, lo que implica iniciar la producción mientras se realizan las pruebas y evaluaciones. Aunque esta estrategia puede acelerar la puesta en marcha de las líneas de producción y la entrega al cliente, resultó perjudicial para el F-35. Los fallos descubiertos durante las pruebas y evaluaciones requerían costosas adaptaciones en los aviones terminados. Además, se encontraron deficiencias en el proceso de fabricación, lo que causó retrasos y aumentó los costos.
Frank Kendall ha expresado la determinación del Ejército del Aire de evitar repetir los errores cometidos en el programa del F-35. Destacó la importancia de obtener el control total sobre los datos de mantenimiento del caza, evitando así la creación de un monopolio perpetuo para el contratista ganador del programa NGAD. El objetivo es aprender de las malas prácticas de adquisición pasadas y garantizar que el NGAD se desarrolle de manera eficiente y efectiva.

El enfoque innovador del NGAD
El Ejército del Aire ha revelado algunos detalles adicionales sobre el NGAD. Este caza de sexta generación se enfrentará a desafíos significativos, como las estrategias Anti-Acceso/Denegación de Área, que se basan en el uso de aviones de alerta temprana y municiones de largo alcance para negar a Estados Unidos y a sus aliados una superioridad aérea sin restricciones. Para hacer frente a esta amenaza, el NGAD incorporará múltiples tecnologías innovadoras.
Una de las características más destacadas del NGAD es su enfoque en el uso de vehículos aéreos no tripulados o drones y aeronaves de combate colaborativas. A diferencia de las aeronaves individuales tripuladas, el NGAD aprovechará la sinergia entre las aeronaves no tripuladas y los cazas pilotados para enfrentar los desafíos actuales y futuros del combate aéreo. Esta nueva visión de combate aéreo proporcionará flexibilidad, capacidad de respuesta y una mayor eficiencia operativa para el Ejército del Aire.
El futuro del NGAD
El objetivo del Ejército del Aire de Estados Unidos es desplegar los cazas NGAD para finales de esta década. A pesar de los desafíos inherentes a un proyecto tan complejo, se espera que el NGAD represente un avance significativo en la capacidad de combate aéreo del país y asegure la superioridad aérea en futuros escenarios de conflicto.
Preguntas frecuentes
El objetivo del proyecto NGAD es desarrollar un caza de sexta generación que suceda al F-22 Raptor y asegure la superioridad aérea en futuros escenarios de conflicto.
El NGAD se enfrenta a desafíos significativos, como las estrategias Anti-Acceso/Denegación de Área, que buscan negar la superioridad aérea a Estados Unidos y sus aliados.
Una de las principales diferencias del NGAD es su enfoque en el uso de drones y aeronaves de combate colaborativas, aprovechando la sinergia entre ellas para mejorar la capacidad de combate aéreo.
El programa del F-35 enfrentó desafíos relacionados con el Rendimiento Total del Sistema y la concurrencia, que llevaron a retrasos y aumentos de costos. Estas lecciones se están teniendo en cuenta para el desarrollo del NGAD.
El Ejército del Aire de Estados Unidos tiene como objetivo desplegar los cazas NGAD para finales de esta década, pero se reconoce que es un proyecto complejo y desafiante.