El Consejo de Seguridad Nacional informó el sábado por la mañana que 39 contagios adicionales elevaron a 268 el número de personas diagnosticadas con coronavirus en las últimas 24 horas.
Otra persona murió por complicaciones del virus durante la noche, lo que elevó el número de muertos a 305. No se dieron detalles sobre la fatalidad.
Las últimas cifras llevaron el número total de casos desde el comienzo de la pandemia a 20 533, de los cuales 4 598 son casos activos. Había 39 personas gravemente enfermas, 29 de ellas con respiradores.
El cuerpo de seguridad informó que se habían administrado 12 766 pruebas el viernes, una caída abrupta de las 16 369 pruebas del jueves. Los índices de pruebas suelen ser más bajos los viernes y sábados.
El viernes, el Ministerio de Salud informó que se encontraron 349 casos en las 24 horas anteriores, la primera vez que se diagnosticaron más de 300 casos en un solo día desde finales de abril.
A pesar del aumento, el gabinete del viernes dio luz verde a la celebración de eventos culturales de hasta 250 personas con ciertas limitaciones. La aprobación se aplicó a los cines y al teatro, y tuvo efecto inmediato.
De acuerdo con la decisión tomada el viernes, los eventos pueden llevarse a cabo siempre y cuando los lugares no tengan una capacidad superior al 75%, se prohíba el baile y se observen las precauciones estándar contra el coronavirus.
El público en los eventos tendrá que sentarse y la venta de entradas debe ser comprada con anticipación.
En ciertas situaciones, con la aprobación previa, también se autorizarán eventos de hasta 500 personas, según decida el gabinete.
En Israel se ha producido un reciente aumento de los casos de coronavirus al dar marcha atrás a las medidas de bloqueo que había iniciado a mediados de marzo, lo que frenó el brote inicial pero también llevó a la economía a un estancamiento casi total. El Gobierno ha advertido repetidamente al público de que siga respetando el distanciamiento social y las órdenes de higiene, en medio de la preocupación de que la disminución de las actitudes esté permitiendo que la propagación del virus tome un nuevo ritmo.
Los líderes han indicado que son reacios a un nuevo cierre nacional, pero que buscarán cierres locales en cualquier punto conflictivo que surja.
El jueves, los ministros del gobierno votaron para poner partes de dos ciudades beduinas del sur bajo un cierre parcial. Los cierres de una semana de dos barrios en Rahat y uno en Arara (Negev) parecen ser las primeras órdenes de este tipo dadas desde que Israel comenzó a retirar gradualmente las restricciones a principios de mayo.
El jueves, el Primer Ministro, Benjamin Netanyahu, mencionó que no habrá más flexibilización de las restricciones sobre el coronavirus hasta que se aplane el reciente pico de infecciones, y advirtió que el gobierno recurrirá a volver a aplicar los cierres para lograr ese objetivo.