El gabinete de seguridad de Israel concluyó una reunión maratónica de siete horas sobre la violencia en Gaza el martes por la tarde con una orden a la FDI para que “continúe sus ataques” contra los terroristas en la Franja “según sea necesario”.
La imprecisión de la declaración se ve en Israel y Gaza como una decisión israelí de volver a la calma después de dos días de violencia que vio a terroristas palestinos en la Franja disparando unos 400 cohetes y proyectiles de mortero contra ciudades y pueblos israelíes a lo largo de la frontera, matando a al menos una persona e hiriendo a docenas. Los ataques de represalia de las FDI contra grupos terroristas han matado a siete palestinos, según el Ministerio de Salud de Hamás en la Franja.
“El gabinete de seguridad discutió los eventos en el sur. El gabinete recibió informes de las FDI y los funcionarios de defensa sobre los ataques [FDI] y las operaciones generalizadas contra objetivos terroristas en Gaza. El gabinete ordenó a las FDI que continuaran sus ataques según fuera necesario”, dijo la Oficina del Primer Ministro en una declaración después de la reunión celebrada en Tel Aviv.
Poco después del anuncio, el jefe político de Hamás en Gaza, Ismail Haniyeh, dijo que si Israel detuviera sus ataques contra la infraestructura de Hamás en Gaza, el grupo terrorista volvería a las conversaciones de alto el fuego.
MK Shelly Yachimovich, una importante legisladora de la Unión Sionista, dio la bienvenida a la declaración del gabinete.
“La declaración revela que el esfuerzo por calmar las cosas continuará, y eso es algo bueno, especialmente ante las llamadas irresponsables para iniciar una operación en tierra”, dijo Yachimovich. “Nadie entiende mejor que el primer ministro [Benjamin Netanyahu] lo fácil que es hacer declaraciones grandilocuentes y sin sentido acerca de contener y derribar a Hamás, y cuán alto es el costo en sangre de una gran operación en tierra [en Gaza] que no cambiará las cosas”.
Yachimovich se refirió a las imágenes que circularon ampliamente en las redes sociales israelíes el martes y mostraron al entonces líder de la oposición Netanyahu en 2009 criticando al gobierno de Olmert por buscar la calma en Gaza en medio de un ataque con cohetes.
También el martes por la noche, el primer ministro Benjamin Netanyahu habló por teléfono con el presidente francés, Emmanuel Macron, y le dijo que Israel “estaba actuando en su derecho de defenderse ante los esfuerzos de los grupos terroristas en Gaza por dañar a los civiles israelíes”, según una declaración de La oficina de Netanyahu.
La decisión del gabinete y los aparentes intentos de devolver la calma a Gaza siguieron a las amenazas de ambos lados de que estaban preparados para intensificar la lucha.
En una declaración el martes, las FDI dijeron que ya habían destruido más de 150 objetivos militares en el enclave costero,
“Hay un amplio margen para objetivos adicionales”, dijo el teniente coronel Jonathan Conricus, un portavoz de las FDI. “En el transcurso de esta noche, hemos señalado a Hamás que tenemos la inteligencia y la capacidad para atacar a una variedad de objetivos militares que pertenecen a Hamás”.
Los portavoces del ala armada de Hamás, el grupo terrorista que gobierna la Franja, amenazaron con comenzar a disparar cohetes más profundamente en el territorio israelí si continuaban los combates, y calificaron de “advertencias”, los ataques recientes en la ciudad de Ashkelon.
“Aproximadamente un millón de sionistas estarán dentro del alcance de nuestros misiles si la decisión del enemigo sionista es continuar su agresión”, dijo un portavoz de Hamás.
Otro portavoz dijo el martes por la mañana que si Israel continúa sus bombardeos a Gaza, las ciudades de “Ashdod y Beer Sheba son las siguientes en la lista”, mientras que un portavoz del grupo terrorista Jihad Islámico Palestino amenazó con atacar Tel Aviv.
El martes, Israel también dejó de cooperar con los oficiales de inteligencia egipcios y el enviado especial de las Naciones Unidas para el proceso de paz de Medio Oriente, Nickolay Mladenov, quienes han estado trabajando para negociar un alto el fuego entre las dos partes, en una clara señal de que Jerusalén estaba preparada para continuar golpeando la Franja si los ataques con cohetes y morteros persistían.
El enorme bombardeo de proyectiles de cohetes y morteros, que comenzó el lunes por la tarde y persistió durante toda la noche y hasta el martes por la mañana, pareció ser el mayor ataque en un período de 24 horas desde la Franja de Gaza, con más del doble de proyectiles despedido que en un solo día de la sangrienta guerra de 2014.
En respuesta al “implacable lanzamiento de cohetes” desde Gaza, el ejército israelí lanzó una serie de ataques terrestres, aéreos y navales contra más de 150 objetivos en la Franja conectados a Hamás y la Jihad Islámica, incluidos “activos estratégicos clave”, según Conricus.
Entre esos activos se encuentran la estación de televisión Al-Aqsa, controlada por Hamás, que Israel dice que fue utilizada para dirigir y alentar actividades terroristas, y la sede de seguridad interna de Hamás.
Como los ataques con cohetes continuaron durante todo el día el lunes por la noche y el martes, el ejército israelí envió refuerzos al sur en forma de tropas adicionales de infantería, tanques y baterías Cúpula de Hierro.
El ejército aún tenía que llamar a un número significativo de reservistas a partir del martes por la mañana, pero el portavoz de las FDI Brig. Gen. Ronen Manelis le dijo a la estación de Radio Darom que aún podría hacerlo si fuera necesario. Un pequeño número de personal de reserva, en su mayoría de unidades de defensa aérea, ha sido puesto en servicio del ejército, dijo Conricus a los reporteros por teléfono.
Según las FDI, más de 400 cohetes y morteros Se han lanzado contra el sur de Israel desde la tarde del lunes, poco después de las 4:30 de la tarde, cuando los terroristas palestinos dispararon un misil guiado antitanque Kornet a un autobús cerca de la frontera, hiriendo gravemente a un soldado israelí .