El ministro de Defensa, Yoav Gallant, anunció el lunes un incremento significativo en los ataques contra Irán en Siria desde que asumió el cargo.
Además, Gallant reveló la existencia de una guerra marítima secreta llevada a cabo por Teherán contra Israel, respaldando sus afirmaciones con pruebas fotográficas de cinco buques diferentes que están siendo utilizados para establecer un nuevo frente contra el Estado judío.
Pruebas fotográficas de los buques utilizados por Irán
Durante su presentación, el ministro de Defensa exhibió una serie de imágenes de las embarcaciones en cuestión: el Shahid Siyavashi, el Shahid Rudaki, el Makran, el Shahid Mahadavi y el Shahid Bagheri. Estos ejemplos demostraron los esfuerzos de la República Islámica por expandir su influencia en Oriente Medio y establecer nuevos frentes contra Israel.
Expansión de la influencia iraní en Oriente Medio y nuevos frentes contra Israel
Gallant advirtió que la reincorporación del régimen de Bashar al-Assad a la Liga Árabe no brindaría inmunidad a los representantes iraníes presentes en el país. Asimismo, haciendo hincapié en la cuestión nuclear, el ministro afirmó que si Irán decidiera enriquecer uranio hasta el 90 %, enfrentaría un “precio muy alto”.
En este sentido, destacó que desde su fundación, Israel ha enfrentado amenazas complejas, pero en la actualidad, Irán busca unificar los diversos frentes de ataque contra el Estado judío.
Irán como la mayor amenaza para la estabilidad regional y mundial
“Irán representa la mayor amenaza para la estabilidad de la región y el mundo. Está librando una guerra de desgaste contra Israel y busca establecer un nuevo frente de Hezbolá en los Altos del Golán, tal como lo ha hecho en el sur del Líbano”, afirmó Gallant durante su discurso en la Conferencia de Herzliya, celebrada en la Universidad Reichman.
Determinación de Israel y su postura en la región
En un claro mensaje de determinación y vigilancia, el ministro de Defensa subrayó que Israel no permitirá que Irán amplíe su influencia a expensas de la seguridad de la región.
Las acciones militares israelíes continuarán en respuesta a las provocaciones de la República Islámica, defendiendo así la estabilidad regional y protegiendo los intereses de Israel en el marco de la creciente guerra encubierta entre ambos países.
En conclusión, el ministro de Defensa Yoav Gallant ha anunciado un aumento significativo en los ataques contra Irán en Siria, junto con la revelación de una guerra marítima secreta llevada a cabo por Teherán contra Israel. A través de pruebas fotográficas, se ha demostrado el uso de buques iraníes para establecer nuevos frentes contra el Estado judío. Israel considera a Irán como la mayor amenaza para la estabilidad regional y mundial, y no permitirá que amplíe su influencia a expensas de la seguridad de la región.
Las acciones militares israelíes continuarán en respuesta a las provocaciones iraníes, defendiendo así la estabilidad y protegiendo los intereses de Israel.
Preguntas frecuetes
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, presentó imágenes de cinco buques utilizados por Irán: el Shahid Siyavashi, el Shahid Rudaki, el Makran, el Shahid Mahadavi y el Shahid Bagheri. Estas imágenes respaldan las afirmaciones sobre la guerra marítima secreta llevada a cabo por Teherán contra Israel.
Israel considera a Irán como su mayor amenaza debido a los esfuerzos de la República Islámica por expandir su influencia en Oriente Medio y establecer nuevos frentes contra el Estado judío. Irán ha estado librando una guerra de desgaste contra Israel y busca establecer un nuevo frente de Hezbolá en los Altos del Golán, similar a lo que ha hecho en el sur del Líbano.
Israel está intensificando los ataques contra Irán en Siria como una medida para contrarrestar la influencia iraní en la región. Las acciones militares israelíes continuarán en respuesta a las provocaciones de la República Islámica.
Esta guerra encubierta entre Israel e Irán tiene el potencial de desestabilizar la región de Oriente Medio y tener repercusiones a nivel mundial. A medida que ambos países se involucran en ataques y contrataques, la situación se vuelve cada vez más tensa, lo que puede tener consecuencias significativas para la estabilidad en la región y más allá.